En su carta anual a los accionistas, el CEO de JP. Morgan, Jamie Dimon, escribió que la quiebra de Silicon Valley Bank y la operación de rescate de Credit Suisse cambiaron “significativamente las expectativas del mercado” sobre el futuro. Días después en CNN, Dimon advirtió que las probabilidades de una recesión “han aumentado” y que las quiebras en el sector bancario inclinan la balanza hacia un estancamiento de la economía.
Por eso, la atención esta semana está puesta en los primeros resultados empresariales. En general, el panorama no es auspicioso. Se esperan balances negativos en muchos sectores.
Como siempre, el puntapié inicial lo dan los bancos. Este viernes reportan JP Morgan, Wells Fargo, Blackrock y Citigroup, parte de los cuales estuvieron involucrados en el millonario salvajate bancario de hace algunas semanas. Habrá que ver si los bancos más grandes de EE. UU. resienten cierta firma el colapso de Silicon Valley Bank y Signature Bank.
El IPC de EE. UU. que conoceremos el miércoles debiera mostrar signos de moderación, tal como ha ocurrido en los preliminares europeos. El mercado espera que la inflación anualizada llegue a 5,2% desde el 6,0% anterior. Con lupa habrá que mirar la tasa subyacente, que podría ubicarse sobre el 5,5% medido en febrero.
Junto con este dato conoceremos las minutas de la última reunión de la Reserva Federal que, recordemos, se dio en medio de la crisis de liquidez de los bancos regionales norteamericanos. La Fed optó por seguir subiendo tasas, siguiendo al Banco Central Europeo que se tomó el mismo camino, pese a la presión que veía desde el sector financiero.
Hay que considerar que el desempleo bajó en EE. UU. a 3,5% en marzo. Pero las previsiones hablan de un aumento en las próximas mediciones y algunos datos muestran que los puestos de trabajo vacantes empiezan a estancarse. La Fed ve en esta información menos presión sobre los precios y así el mercado asigna hoy un 70% de probabilidades a que la Reserva Federal suba la tasa en su próxima reunión del 3 de mayo. Pero podría ser la última.
En Europa tendremos el dato definitivo de inflación en marzo. Los indicadores preliminares en Francia, Alemania y España mostraron una moderación de los precios en el tercer mes de este año. Veremos si esa tendencia se confirma esta semana que comienza con un día festivo en gran parte de ese continente.
En China conoceremos algunos datos que podrían dar luces sobre su recuperación económica, tras el fin de la política “cero covid”. El IPC de marzo debiera mostrar un incremento, al igual que los datos de balanza comercial.
Pero lo que más inquieta en Asia es el recrudecimiento de la tensión entre China y Taiwán. China realizó ejercicios militares con munición real cerca de Taiwán. Una escalada militar que viene desde agosto pasado y que se intensificó con el viaje a la isla de la ex presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, en agosto pasado. Sin embargo, estas actividades se intensificaron luego que la presidenta taiwanesa, Tsai Ing Wen, viajó a EEUU y fue recibida en California por el actual presidente de la Cámara Baja, el influyente Kevin McCarthy, a pesar de las amenazas de Beijing.
Hitos de la semana
Martes 11
Miércoles 12
Jueves 13
Viernes 14
La Ley Karin no representa un gran cambio a lo existente ni mejorará a priori los ambientes de trabajo, pero sin duda genera grandes desafíos para las empresas que, si se aplican con altura de miras, ayudarán, sin duda, a dar herramientas de gestión a sus trabajadores, repercutiendo en un mejor clima laboral y en […]
El IPSA continúa consolidándose como un índice resiliente en un entorno volátil, impulsado por el optimismo local y corporativo. La caída del dólar y los precios altos del cobre favorecen la estabilidad económica chilena, mientras las perspectivas internacionales apuntan a una moderación en las presiones inflacionarias.
El mercado laboral chileno muestra signos de recuperación con una baja en la tasa de desempleo al 8,2%. Sin embargo, el crecimiento laboral sigue estancado, con menos empleos y una masa salarial debilitada. Reformas como el alza del salario mínimo y el desaliento laboral profundizan los desafíos estructurales.
La caída del IPSA refleja presiones locales e internacionales, mientras que la intervención de Hacienda en el mercado cambiario ha ofrecido cierto respiro al peso chileno, aunque el contexto global sigue siendo un desafío para las monedas emergentes.
Sin un crecimiento sostenible que se acerque más al 5%, seguiremos en un ritmo cansino, empeorando en todos los indicadores y año a año seguiremos con las mismas discusiones. Hagamos que las cosas cambien.