Estar agradecido por lo que se es y se tiene no es abrazar la mediocridad ni contentarse con poco. Agradecer es detenerse y mirar amablemente donde se está parado. Es sólo una pausa en el camino para conectarse con lo mejor de la vida.
Por ahora iré a una pizzería que me recomendaron, pediré una marinara y como que no quiere la cosa sacaré una lata de mi bolsillo y le pondré unas anchoas de Liguria que me regalaron. Disfrutaré como marinero napolitano. Algo es algo.
Como dice la canción “sólo se vive una vez” y mejor aprovechar vivir felices acompañados de amigos o desconocidos comiendo choros y conversando, aunque a uno le lleven la contra. Algo es algo.
El cocinero es el bencinero del deportista que necesita de energía de la buena para poder lograr su objetivo porque ya no se ganan las carreras comiendo cualquier cosa ni cuchareando directo del refrigerador sino que con buenos carbohidratos.
Es muy lindo un potrero con habas. Si se siembran en otoño y el invierno no es muy duro, se pueden cosechar a principios de la primavera y eso es lo que ha ocurrido este año en mi macetero, que dio dos vainas muy pero muy ricas y totalmente insuficientes. Afortunadamente, La Vega provee de […]
Las barrigas prominentes se han trasladado de los propietarios a los proletarios, la glotonería ya no es proeza sino defecto y los descubrimientos de nuevos sabores se hacen en tecnológicas cocinas y laboratorios de snacks multinacionales.
Aunque parece un debate banal, estéril y que no nos lleva a ningún lado, el origen del humus es de la máxima importancia. La civilización se construye en parte por compartir cosas comunes y por tolerar lo que por momentos parece insoportable sin agredir ni menos matar al vecino.
Aunque hasta hace pocos años atrás lo más común era que en los restaurantes se nos diera la opción de helada o “natural”, cada día nos gusta más tomar cosas frías y con hielo (a pesar que los mismos restaurantes sigan escatimando los cubos de hielo como si fueran brillantes).
Hay comidas serias y otras divertidas. Los suflés salados o dulces hechos con gruyere, salmón, frambuesa o grand manier siempre son esponjosos como las nubes e idénticos a los que fueron inspiración de los Montgolfier. No los celebramos por sustanciosos sino que por deliciosos. Algo es algo.
Nada más pedagógico que la primera limonada, ácida y dulce al mismo tiempo, que como la vida nos hace arrugar la cara pero también aprender a saborearla incluso estando enfermos, y de un sorbo vuelve el alma al cuerpo, como marino con limones de Palermo. Algo es algo.
San Martín hizo su brindis y fue en ese instante cuando empezó la juerga nacional que dura hasta hoy. El general argentino levantó su mano y al grito de ¡salud! bebió el vino de un trago y quebró la copa lanzándola al suelo. Fueron tantos los brindis que se hicieron esa noche, que no quedaron […]
Nunca viene mal una innovación para hacer que los días difíciles sean menos fríos y más llevaderos. No le hablo sólo de ablandar mantequilla sino de ponerle color a los platos caseros a punta de microondas. Porque es rico el pescado con puré pero es mejor si le pone alcaparras fritas. Fritas en el microondas.