Un salvavidas. Gabriel Boric hizo una buena primera cuenta pública. Hizo un importante resumen del estado de la situación nacional y habló de todos los temas que les importan a los chilenos. Se mostró empático y sensible a las preocupaciones populares y a lo que todos conceden que son problemas urgentes de resolver. En lo grueso, construyó su discurso sobre pilares suficientemente transversales como para poder apelar a todos. En lo fino, dio detalles relevantes sobre lo que haría el gobierno para revertir muchos de los problemas de cada una de las áreas temáticas. En fin, un discurso políticamente correcto.
¿Y los gastos? En este caso, hay antecedentes mezclados. Boric habló sobre la necesidad de tomar decisiones políticas responsables y no caer en populismos. Punto para el presidente. Pero cuando fue diputado, hasta apenas algunos meses, votó cuatro veces a favor de los retiros de fondos de pensiones. Punto en contra del presidente. Lo mismo ocurre con la violencia, la cual pidió entender como legislador y ahora pide combatir como presidente. Otra vez, es entendible la posición de Boric, pero, por su registro contradictorio debe saber que a pesar de prometer el cielo, el mar y la tierra, no necesariamente subirá en las encuestas.
Prometer y no entregar. Las preguntas de gasto público son importantes, porque, como se sabe, es fácil prometer, entregar, y dejar al país a la merced del viento para el sucesor, pero es difícil (e quizás impopular) ser fiscalmente responsable. Pero hay otra combinación que se vuelve relevante a la luz de la cuenta pública. Y esa es la de prometer y no entregar. Pues, si efectivamente se Aprueba la nueva Constitución, y aumenta el gasto público, es probable que mucha de la agenda del gobierno se vea aplazada. Eso sin contar las dificultades que el presidente tendría para cumplir sus promesas si es que gana el Rechazo.
En Chile ya no hay épica, no hay un norte ni un sueño. La idea de llegar a ser un país desarrollado, tantas veces repetida por los políticos noventeros -quienes tenían a Portugal como norte- incluso ha desaparecido del discurso público. Preocupante.
Se ha prolongado demasiado la anomalía de que el Estado no reaccione como corresponde ante la grave circunstancia de que una amplia zona del territorio nacional está fuera de su control. Para que la Constitución y las leyes tengan vigencia, y para que la convivencia en libertad sea posible, es indispensable el recurso de la […]
Los cambios al sistema político debieran apuntar a algo simple pero complejo de resolver como es acotar al máximo los espacios para el payaseo, la farandulización, la pasarela de rostros sin más bagaje que la pantalla chica, la premiación del discolaje y la polarización. Visto así, debiéramos ser capaces de proyectar cualquier cambio al sistema […]
Los politólogos tienen un punto: la fragmentación es parte del problema, pero no el único y quizás ni siquiera el principal. Si hay pocos partidos, pero sus militantes se mandan solos, gobernar es igual de difícil. ¿Queremos fortalecer los partidos? Quitémosle el cupo a los amurrados que renuncian. Hagamos listas cerradas para que tengan el […]
Este jueves asistí a Enade y me sorprendió particularmente la notoria falta de visión, tanto del empresariado como del gobierno, respecto al impacto de la inteligencia artificial en el crecimiento económico, la seguridad y la formación de capital humano. Un proverbio japonés encapsula perfectamente mi percepción: “Visión sin acción es un sueño diurno. Acción sin […]