La inocua corrupción
La medición del CEP se realizó en pleno despliegue del escándalo Democracia Viva. Aquello tuvo como correlato un alza estadísticamente significativa en la preocupación país por la corrupción, la que se eleva desde un 14% a un 21%, pasando del séptimo al sexto lugar en el orden de prelación de preocupaciones ciudadanas, respecto de la última medición de diciembre 2022. La pregunta es, ¿es proporcional esta alza en el nivel de conmoción ante la corrupción con la magnitud del escándalo que hemos conocido? Probablemente no. Seguramente en La Moneda sacan cuentas alegres tras esta medición. Han logrado, contra todo pronóstico, navegar con pericia una de las crisis políticas más severas desde que el Frente Amplio llegó al Gobierno. El dato más contundente que reafirma aquello es que la aprobación del Presidente Boric experimenta un alza en medio de la tempestad pasando desde un 22% a un 27%.
El granítico 30%
Como se señalaba, el diseño de La Moneda ha sido parapetarse en su base de apoyo dura del 30%, con resultados positivos. Aunque la presentación de datos del CEP aún no permite desagregar la aprobación presidencial, a la luz de otras mediciones, conocemos quienes integran ese grupo infranqueable de respaldo al Presidente Boric: mayoritariamente jóvenes, de ingresos medios y altos, apruebistas del 38% y culturalmente progresistas. Son un grupo que en su mayoría se informa a través de medios de comunicación no tradicionales y en quienes la idea de que “la corrupción es generalizada, no un patrimonio de esta administración” cobra mucho sentido. De ahí que, en ellos, el escándalo Democracia Viva no haya generado un efecto desencanto. La ilusión en ellos con esta administración, pese a todo, aún sigue vigente.
Fatiga Constitucional
Las cifras son contundentes, un 49% está “no muy interesado o nada interesado” en el proceso constitucional. Si en diciembre de 2019 un 56% de los encuestados por el CEP planteaba que “probablemente ayude a resolver los problemas del país” esa cifra hoy es de un 23%. Por contrapartida, un 48% considera que la nueva Constitución probablemente deje las cosas igual, 18 puntos porcentuales más que en la última medición de noviembre-diciembre 2022. La desafección con la cuestión constitucional parece ser un tema bastante transversal respecto de características sociodemográficas e inclusive políticas del grupo encuestado, y por lo mismo, bastante preocupante, de cara al próximo plebiscito de diciembre. Sin ir más lejos, un 41% de los identificados con la izquierda evalúa muy mal el proceso, y casi como si fuera un espejo, un 38% de quienes se identifican con la derecha también lo evalúan negativamente. Probablemente desde antes del estallido que izquierda y derecha no concordaban en algo.
Restauración post octubrista
La orientación política y cultural de la sociedad apunta hacia una dirección: orden, seguridad y respeto a la autoridad. Frente a la pregunta: “En vez de tanta preocupación por los derechos de las personas, lo que este país necesita es un gobierno firme”, la demanda por firmeza se eleva desde un 32% en 2019 a un 66% en 2023. Siguiendo la misma tendencia ante la pregunta “La obediencia y el respeto por la autoridad son los valores más importantes que los niños debieran aprender” el porcentaje de encuestados que se posiciona en el eje pro-respeto a la autoridad pasa desde un 49% a 79% comparando 2019 con 2023 y frente a la disyuntiva libertades públicas vs seguridad, la preferencia por seguridad alcanza el máximo nivel desde 2008, con un 72% de las menciones. Inclusive, el 50% de los chilenos, de acuerdo al estudio del CEP adhiere a la idea de que “se deben suprimir las libertades públicas y privadas para controlar la delincuencia” y la recomposición de la confianza en las fuerzas armadas, de orden y seguridad es total, en comparación al año 2019, es total.
¿Quién capitaliza?
¿Quién capitaliza este nuevo escenario? ¿Qué fuerza política pareciera estar leyendo mejor la realidad país? El Partido Republicano. La tienda de José Antonio Kast es el único partido político que registra un alza estadísticamente significativa en su nivel de identificación, pasando del 2% al 10%, una cifra no necesariamente elevada, pero muy por lejos del promedio de 3% de identificación que posee el resto de los partidos políticos.
A nivel de liderazgos, son tres las figuras que logran despuntar en este nuevo escenario político: el ex Presidente Sebastián Piñera, cuya evaluación positiva se eleva en 10 puntos porcentuales, alcanzando un 38%. José Antonio Kast, que registra un alza de 9 puntos en su aprobación y Evelyn Matthei, quien también logra elevar su imagen positiva en 9 puntos, con la salvedad, de que es la líder política nacional con mayor nivel de evaluación positiva. Es sabido que adhesión no es sinónimo de intención de voto. No obstante lo anterior, sí se observa cierta tendencia favorable a los liderazgos de la derecha/centro derecha.
El rol del Congreso será fundamental, ya sea para efectivamente hacer más eficiente la Ley de Presupuesto, como para disminuir la discrecionalidad y espacios de opacidad, pero los anuncios entregados dan líneas de que, al parecer, se está recogiendo el guante y elevando los estándares de competencia, transparencia e integridad.
Si más allá de las buenas palabras el día de la presentación del presupuesto, el Presidente entiende el profundo mensaje que hay en las ansias por recuperar el crecimiento y el vértigo de la movilidad social, tiene la oportunidad de dar una sorpresa, inesperada viniendo de él pero intensamente añorada.
Boric, Jackson y Vallejo, por mencionar algunos, no lideraron un gran proyecto ideológico, únicamente lideraron un proceso de movilización, agitación social e impugnación al poder. Ante el vaciamiento de todo eso, sólo queda volver a los orígenes: la calle, aunque ésta ya no sea copada por cientos de miles estudiantes precarizados, sino que por un […]
Chile no puede permitirse el estancamiento o el retroceso político, económico y cultural al que lleva la anomia que se instaló en el país hace cuatro o cinco años y que algunos esperan poder prolongar al infinito.
Pese al cansancio de la población frente a un debate que ha sido percibido como “un asunto de los políticos”, lejano de las urgencias nacionales, se requiere dar la mejor salida posible al proceso constituyente que está en curso. Existen hoy mejores condiciones para renovar el pacto constitucional, lo que implica definir lo que es […]