Noche de cuchillos largos: Cómo Boric y un reducido grupo de ministros y asesores del Segundo Piso enfrentarán la jornada del 7 de mayo en La Moneda

Boric irá a votar a Magallanes para las elecciones de constituyentes y volverá a La Moneda por la tarde, donde habrá un acotadísimo grupo de ministros -Carolina Tohá, Camila Vallejo, Maya Fernández y Juan Carlos Muñoz- monitoreando las materias propias de un día electoral. Esta vez, a diferencia del plebiscito del 4S, no estará invitado el gabinete a seguir los cómputos y todo apunta a que la directora de Estudios del Segundo Piso, Luna Follegati, estará a cargo del seguimiento político-electoral de la jornada. Los cálculos del gobierno son sombríos -desde un salto del P. Republicano a la posibilidad de que el oficialismo quede sin poder de veto en el Consejo- y preocupan las cuentas internas y el efecto político de que se rebaraje el poder de sus coaliciones en las urnas. El PC ya envió el primer mensaje al gobierno.

Qué observar. El mañana del domingo 7 de mayo, como ocurre con cada elección desde que entró en la política, Boric estará en Magallanes para sufragar para las elecciones que ese día elegirán a los 50 integrantes del Consejo Constitucional que redactará una nueva Constitución.

• El Presidente votará en la mesa 228 del Liceo Industrial Armando Quezada Acharan, en Punta Arenas. Y, más tarde, hará una declaración pública.
• Convergencia Social, el partido de Boric, inscribió a dos candidatos. Se trata de Jessica Bengoa, militante del partido, ex presidenta de la CUT regional y favorita de él en su aventura por la alcaldía de Punta Arenas en 2016. También corre el independiente Julio Contreras. Para algunos la elección en Magallanes, como ocurrió para el plebiscito, donde ganó por lejos el Rechazo, puede constituir un primer termómetro de lo que podría tras el conteo, entrada la noche del domingo 7.
• Boric regresará a Santiago por la tarde y se instalará en La Moneda.
• El monitoreo operativo de las elecciones estará a cargo de un acotadísimo grupo de ministros, que se encargarán de las materias propias de un día electoral. Se trata de los ministerios del Interior, al mando de Carolina Tohá; la Secretaría General de Gobierno, con Camila Vallejo; Transporte, con Juan Carlos Muñoz y Defensa, representada por Maya Fernández.
• Los titulares de Interior, la Segegob, Transportes y Defensa desempeñaron el mismo rol en el plebiscito del 4 de septiembre (con Izkia Siches como jefa de gabinete).
• Todo apunta a que este domingo 7, tal como ocurrió para el 4S, el lugar de operaciones de estos 4 secretarios de Estado sea el Salón Democracia, en Interior.

El contraste con el 4S. Para el plebiscito, donde para algunos se jugó buena parte del destino de su administración, Boric convocó a todo el gabinete a las 18:00 horas a seguir la elección en el Salón Montt Varas, donde había bebidas y sandwiches.

• Hasta ahora solo están confirmados los ministros anteriormente mencionados, además de los faltantes del comité político, como Álvaro Elizalde y Mario Marcel.
• El reducido grupo de habitantes para ese día en Palacio están en línea con todos los estudios de opinión, incluyendo análisis internos de La Moneda, en que se proyecta una noche muy difícil para el oficialismo y Boric.
• Hasta ahora no hay espacios especiales preparadas para el discurso que hará esa noche Presidente, como se planeó originalmente para el 4S, cuando el entonces jefe de avanzada (Nelson Alveal) ordenó instalar unas tarimas en la Plaza de la Constitución, las que más tarde desarmaron y terminaron con un mensaje audiovisual de Boric asumiendo la derrota.
• De la escasa presencia de funcionarios de gobierno para el 7 de mayo en La Moneda hay una versión oficial, que apunta a que es innecesaria una convocatoria masiva del gabinete, ya que si el plebiscito era una elección binaria por la cual el gobierno se había jugado -el Presidente fue uno de los principales promotores del Apruebo en sus primeros meses en La Moneda- ahora se trata de un evento electoral de múltiples listas y candidatos

El segundo piso. Donde seguro que habrá movimientos será en el Segundo Piso de La Moneda, encargado del monitoreo político-electoral. Todo apunta a que la filósofa Luna Follegati, directora de Estudios de la Presidencia y militante de Convergencia Social, será quien lidere un grupo de trabajo.

• En el 4S, esta función la cumplió el hoy jefe de gabinete de Boric, Carlos Durán, el también militante de Convergencia Social que para entonces se desempeñaba como jefe del departamento de Estudios.
• El rol de Durán fue controvertido en la última elección.
• De acuerdo a La Tercera, el sociólogo -considerado como uno de los ideólogos del Frente Amplio- había transmitido internamente que la opción Apruebo tenía chances de vencer en el caso de que la participación no superara el 60% del electorado, lo que entregó una equívoca señal a algunos dirigentes del Socialismo Democrático y Apruebo Dignidad, que llegaron a pensar que las encuestas de opinión pública eran desafiadas por estudios internos de La Moneda y que el triunfo era posible. Ni lo uno ni lo otro ocurrió y esa noche se recuerda como una de las más amargas de Boric.

Las preocupantes proyecciones de La Moneda. Desde hace semanas los equipos de asesores de La Moneda se encuentran trabajando en proyecciones y estudios electorales. Todos coinciden con las tendencias de diversos estudios que manejan en los partidos oficialistas y de oposición. Las principales preocupaciones electorales de La Moneda, y sus severos efectos en el político, son al menos 3.

1. El factor Republicano. En La Moneda estiman que la duda no está en si el partido de Kast logrará un avance importante en las urnas, lo que dan por hecho, sino que la duda más bien su duda está en si le propinan una derrota a Chile Vamos. Para autoridades consultadas se trata de un escenario muy complejo, ya que la tesis del diálogo con el gobierno podría ser la principal derrotada y el margen de negociación de sus reformas -que está en pleno proceso- se reducirá. Demás está decir que, en un proceso constitucional que ya tiene bordes, no está claro la posición que tomarán a fin de año sus aliados -como el PC- para el plebiscito de salida.

2. Una derrota para el oficialismo. Algunos estudios internos muestran que Republicanos y Chile Vamos obtendrían la misma cantidad de consejeros electos. Pero, sumado a los escaños que obtenga el PDG, representan un derrotista panorama electoral para el oficialismo. El problema es el equilibrio de fuerzas en que quedará Apruebo Dignidad y el Socialismo Democrático, las 2 almas del gobierno, y su proyección en términos de poder.

3. El incierto poder de veto. En La Moneda está instalada la idea de si sus 2 coaliciones alcanzarán o no a elegir 21 consejeros, el piso para tener poder de veto, en una elección muy incierta, al ser obligatoria y con un gran número de indecisos. Lo único claro es que en el Gobierno manejan la tesis de que mientras menos gente vaya a votar, mejor le irá al oficialismo. Quizás ese factor haya incidido en que la para algunos escasa campaña para convocar a los electores a las urnas.

La noche de los cuchillos largos. Todo apunta a que la fractura por las 2 listas con que compite el oficialismo, pese a que Boric pidió solo una y se jugó porque los socialistas compitieran junto al FA-PC, comenzarán a cobrarse la noche del 7 de mayo. Y todas las miradas se dirigen al PPD, que apostó por dar una señal de autonomía y cuya presidenta, Natalia Piergentili, compite como candidata por un cupo en el consejo.

• Si para el 4S todos los partidos llegaron a la sede del PS, donde siguieron los cómputos del plebiscito, hasta ahora las colectividades de ambos conglomerados no han dado otra señal que no sea que esperarán por separado los cómputos.
• Lautaro Carmona, el secretario general del PC, dio la primera señal este jueves. “Podríamos haber tenido eficacia completa si hubiéramos ido en una sola lista. Esto ya es referencia histórica y solo nos va a servir para ver cómo fue este proceso. (…) Espero que no tengamos que decir que nos perdimos un consejero”. “Sobre el reequilibrio, creo que va a estar presente en el diálogo político. Es un proceso en el que cada uno de nosotros como partidos hagamos una evaluación que tome en cuenta todos los factores para sacar enseñanzas y compartirlas. Ahí creo que va a aparecer la discusión sobre por qué una fuerza tiene más o menos influencia”.
• Si las cuentas en el oficialismo se dan como un hecho, un factor que preocupa en La Moneda son el equilibrio de las fuerzas, como planteó Carmona.
• Tras la derrota del 4S, Boric giró hacia su administración la centroizquierda y Tohá tomó el control político del gobierno. El avance del Socialismo Democrático tuvo quizás su expresión más nítida hace una semana, cuando Elizalde entró a la secretaría general de la Presidencia.
• El problema es si Apruebo Dignidad se impone en las urnas al Socialismo Democrático y cómo Boric administra ahora ese factor, que normalmente trae aparejadas presiones para que la representatividad de los partidos en las urnas tengan un correlato en el gabinete, las subsecretarías y los cargos de tercera línea.

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