Con el sorpresivo resultado de la Reforma Tributaria en la Cámara, pareciera que no se puede hablar de nada más en la economía chilena. Pero también es importante hablar de cómo han subido los sueldos reales recientemente. A inicios de semana el INE entregó el dato de remuneraciones reales del primer mes de 2023. Yo sé que querríamos tener datos más actualizados, pero estas estadísticas oficiales tienen un rezago y recién podemos ver enero. Me parece que son de esas noticias que marcan un punto de inflexión y que no han sido debidamente advertidas.
Las remuneraciones reales están subiendo, rebotando de forma vigorosa en los últimos dos meses de datos, tal como se ve en el gráfico.
NOTA TECNICA: Nivel del Índice de Remuneraciones Reales en Chile producido por el INE y registrado en las Estadísticas del Banco Central de Chile. Color azul es sólo ayuda visual para destacar el periodo nov 2021 a enero 2023, o sea los últimos dos meses de datos. Link a los datos. La conjetura del autor de la columna es que los titulares de prensa mencionados se centraron en reportar los cambios en 12 meses (p. ej. enero a enero), que resultan negativos por la tendencia previa (linea roja), pero que no reflejan la evolución reciente de los últimos meses. Por cierto la variación mes a mes puede tener componentes estacionales que desaparecen al mirar diferencias en 12 meses, pero la diferencia desde nov 2022 excede por bastante la estacionalidad histórica (serie completa desde 2010).
Aclaremos que el índice se basa en los sueldos en pesos que ganan los trabajadores, al que posteriormente se descuenta el efecto de la inflación. O sea, mide el poder adquisitivo en bienes, que es lo que nos debiera importar a nosotros los trabajadores, que somos la mayoría de los votantes. Incluso, la literatura científica ha mostrado vínculos entre los salarios reales y la popularidad de un gobierno.
Como se ve en el gráfico, hay razones para cierto optimismo, porque en diciembre 2022 y en enero 2023 hubo alzas que totalizan un 2,3% por sobre el mínimo de noviembre (destacados en azul). Visualmente es una recuperación relevante. Para ponerlo en perspectiva, en estos dos meses se ha recuperado prácticamente todo el índice de remuneración real que había al inicio del Gobierno. También podemos decir que el salto reciente recupera dos tercios de la caída de remuneración real que se viene arrastrando desde inicios de 2021, antes del inicio de la inflación.
Esta recuperación es importante para los trabajadores y es también una señal relevante de actividad en el mercado laboral, con salarios corriendo más rápido que la inflación.
Hay una verdad económica que conviene recordar: no se puede recaudar sobre lo que no se genera. Y si algo ha quedado claro en la experiencia reciente, es que más impuestos no necesariamente significan más recursos. A veces, ocurre exactamente lo contrario.
Incrementar la asignación a Activos Alternativos al 20% en los próximos años podría añadir un 1% anual a las rentabilidades, elevando las pensiones autofinanciadas hasta un 25% más. Esto crearía un círculo virtuoso: mayores ahorros financian el desarrollo, generando empleos y fortaleciendo el sistema.
Seguir generando puentes de confianza es uno de los elementos clave para que avancemos en una dirección más positiva de mayor crecimiento, empleos formales, aumento de salarios y mejores políticas públicas en materias tan fundamentales como la seguridad, educación, salud, entre otras.
La gran norma anticorrupción (FCPA) no está muerta y la gran noticia es que se ha retomado su aplicación. Aunque la ruta es algo distinta, será importante estar especialmente atentos a su aplicación en los próximos meses.
Más allá de este nivel de incertidumbre, 2025 se está mostrando como un año de consolidación para las criptomonedas, cuya capitalización global ya sobrepasa los US$3.3 trillones, con Bitcoin representando una dominancia de más del 60% del mercado.