El simbolismo de la ausencia en Fabiola Campillai de la Cuenta Pública de Boric

“Como muchos de ustedes me siento decepcionada de este gobierno”, indicó la senadora Fabiola Campillai, quien había apoyado a Boric durante su campaña y fue clave en los indultos entregados a los llamados presos del 18-O, uno de los momentos más difíciles del Presidente en La Moneda. El respaldo de Campillai en la campaña fue clave, al ser un ícono del estallido y simbolizar a la izquierda más dura, como ocurre hasta hoy entre sus partidarios. Aquí la historia.

Qué observar. La senadora Fabiola Campillai anunció pasadas las 23 horas del viernes en sus redes sociales que no asistirá a la Cuenta Pública del Presidente Gabriel Boric.

• “Como muchos de ustedes, me siento decepcionada de este gobierno”, dijo la senadora por la Región Metropolitana. “Tengo memoria que siendo candidato el Presidente se comprometió con los derechos humanos, tengo memoria que siendo candidato él dijo que nos iba a apoyar en verdad, justicia, reparación, y garantías de no repetición. Tengo memoria que en conjunto creamos la mesa de reparación y hoy la sepultó en el olvido, hoy, la ciudadanía clama por más seguridad pública, a seguridad es un derecho sobre todo para los más vulnerables”.
• “Presidente Gabriel Boric: ¿Cómo pretende darle seguridad a todos los chilenos si no ha sido capaz de dar una solución definitiva a las víctimas de violencia de Estado? Espero anuncios sobre la Ley de Reparación integral, el sistema nacional de cuidados y medidas en contra de la corrupción al interior de las policías”, añadió.
• El gobierno evitó enfrentar a Campillai y sostuvo que ha mantenido un diálogo permanente con ella, añadiendo que su crítica era respetable.

Distanciamiento. En marzo de 2022 la senadora votó en contra de la solicitud del Presidente para prorrogar el estado de emergencia en La Aracanía. “No puedo aceptar que un problema de humanidad se militarice… No a la militarización en el norte y el Wallmapu”.

• En julio de ese año Campillai criticó a La Moneda por no recibir apoyo a un proyecto de amnistía a los llamados presos del estallido de octubre de 2019. “Voy a seguir luchando por los presos hasta el último, hasta que el último de ellos esté en la calle”, dijo.
• El distanciamiento con Campillai, un ícono del estallido de 2019, contrasta con el apoyo que recibió Boric de ella para la campaña y tiene una serie de simbolismos.

Apoyo e indulto del 18-O: Desde los días siguientes a la primera vuelta, el entonces comando de Boric inició contactos con Campillai para obtener su apoyo. La parlamentaria,, quien consiguió ser electa pese a competir como independiente fuera de lista, al obtener 15,15%, había condicionado su apoyo hacia él a que se comprometiera con los indulto a los llamados presos del 18-O.

• Corría la segunda vuelta y Boric apuntaba al elector más moderado en segunda vuelta, robusteciendo su agenda de seguridad. Campillai, sin embargo, lo respaldó. Para ella no era opción no hacerlo en una contienda con Kast.
• “Llamo a todo mi pueblo que salió a votar el 21/11, que creyó en mí, a votar por Boric, a seguir movilizándonos y luchando por nuestros derechos”, dijo entonces la senadora, quien perdió la visión tras ser impactada por una lacrimógena de Carabineros durante las protestas del 18-O, cuando estaba en un paradero esperando un bus.

Telón de fondo: La señal de Campillai permitió entonces a Boric reafirmar el apoyo del electorado que se situaba más a la izquierda que el FA, que se agrupó por momentos en la ex Lista del Pueblo. Se trataba de un sector que había tenido reticencias con él producto de su apoyo a la idea de legislar la ley antibarricadas y su rol en el acuerdo constitucional del 15 de noviembre de 2019.

• El respaldo de la senadora se produjo en momentos en que la movilización a las urnas de los grupos más radicales no estaba del todo asegurada y cuando Boric, como se mencionó anteriormente, intentaba moderar su discurso para ampliarse al centro político.
• Las críticas de ese mundo llevaron a que el entonces candidato fuera agredido en una visita a la cárcel a una persona en prisión preventivaluego de ser detenido durante el del 18-O, semanas después de que Jadue lo responsabilizara de la existencia por la ley antibarricadas, y que la Lista del Pueblo difundiera funas a él.
• En el PC, tras la derrota de Jadue, advertían que Boric debía asegurar que los 700 mil votantes de su rival se movilizaran por él.
• Campillai era un símbolo para ese mundo.
• “Ella suma a la campaña de Boric, sin perjuicio de que la izquierda más dura o no vaya a votar por Boric o lo haga a regañadientes”, planteó entonces el experto electoral Mauricio Morales. “El apoyo de ella es relevante, porque salió electa en la Región Metropolitana con una base popular pocas veces vista. Ella complementa el voto ñuñoíno por Boric y le facilita la entrada a un mundo popular históricamente esquivo para el FA”.
• “A Boric le fue bien hasta el segmento medio, medio-bajo, pero ya en los bajos y metropolitanos le fue pésimo”, añadió el director de Criteria, Cristián Valdivieso.
• Pocos días después de llegar a La Moneda, el ex ministro Jackson anunció desde La Moneda- junto a Campillai- que se enviaría un proyecto de amnistía a los presos del 18-O, el que no prosperó.
• Todo apunta a que la senadora tuvo un rol clave en los indultos que entregó Boric a los llamados presos involucrados en delitos durante el estallido. Se trató de uno de los peores momentos de su administración, que terminó con la salida de su jefe de gabinete Matías Meza Lopehandía y la ministra Marcela Ríos al otorgar beneficios a personas que tenían pronturarios por delitos comunes, como Luis Castillo.
• El Presidente terminó revocando indultos irregulares y, con ello, el apoyo de Campillai.

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