-La Convención está llegando a su fin. ¿Cuál es su balance?
-Los chilenos elegimos la Convención Constituyente con varios objetivos. En primer lugar, para reconquistar la unidad del país, en un momento de mucha confrontación y violencia. Pero en vez de contribuir a una Nación más unida, nos propone dividirnos en varias Naciones.
En segundo lugar, la elegimos para mejorar la calidad de nuestra democracia. Pero también nos propone un retroceso. Quiebran el principio de una persona un voto. Tal como se hizo en la conformación de la misma Convención Constituyente. A la lista de los pueblos originarios les correspondían 8 convencionales, y les dieron 17. Todos de izquierda radical. Ahora proponen aplicar el mismo sistema para la Cámara de Diputados y todos los órganos de representación popular. Y, luego, con la Cámara desbalanceada, debilitan todos los demás contrapesos de poder: el Senado, el Gobierno, el Tribunal Constitucional y el Poder Judicial. Además suprimen el Estado de Emergencia, dejando al Estado Democrático atado de manos para enfrentar la violencia.
-¿No se avanza al garantizar derechos sociales no consagrados?
-Con una mano nos proponen garantizar los derechos sociales y con la otra lo hacen imposible, al impedir la inversión y el crecimiento y, por tanto, los recursos necesarios para responder a las necesidades de salud, educación, pensiones o el combate a la delincuencia.
-Pero habrían garantías constitucionales.
-Para garantizar el derecho a la salud se necesitan más hospitales, médicos y medicamentos. Ello exige una cantidad importante de recursos públicos. Lo mismo ocurre respecto de los demás derechos sociales.
En los últimos 30 (años) el gasto del Estado en salud, educación, vivienda, previsión y demás sectores sociales ha aumentado en más de 6 veces, en términos reales. Más del 80% de ese aumento ha venido de la inversión y el crecimiento. Menos de un 20% de las reformas tributarias.
-¿No existen garantías de que esos derechos sociales sean financiables?
-El proyecto de nueva constitución impide el aumento en la inversión y crecimiento que necesitamos. Les dice a quiénes están considerando invertir en Chile que si el Estado los expropia, la Constitución no les garantiza que se les pague el total de lo invertido. La inversión en minería requiere de un horizonte de varias décadas. Pero las concesiones mineras no tendrían garantía constitucional. Los derechos de agua también serían precarios. La autoridad administrativa los podría caducar en cualquier momento. Podríamos seguir. ¿Quién va a invertir en estas condiciones?¿De dónde van a salir los recursos para garantizar los derechos sociales? Serían sólo derechos de papel sin reflejo en la realidad.
-¿Y usted, dado este diagnóstico, tiene decidido su voto, o va a esperar algo más?
-Lo tengo decidido. Voy a rechazar.
-¿Se atrevería a hacer una predicción del resultado del plebiscito, a dos meses de la votación?
-Estoy convencido que va a ganar el Rechazo. Pero ese no será el final, sino el comienzo. Desde el día siguiente tendremos que trabajar para exigir que el Estado Democrático ponga fin a la violencia que se ha apoderado del país, desde hace ya algunos años.
Desde el día siguiente tenemos que trabajar para construir la institucionalidad constitucional y legal que el país necesita. Sobre la base de un amplio acuerdo político. Y con ello salir de la situación de estancamiento económico en que nos encontramos.
-¿Qué exige un pacto de esa naturaleza?
-Esto exige enfrentar el clima político de confrontación, agresiones verbales, cancelaciones y funas, que han campeado en los últimos años.
-¿Y qué viabilidad tiene ese acuerdo en un país donde las instituciones, partiendo por las políticas, están por el suelo en todos los estudios de opinión?
-Estoy convencido que las condiciones políticas estarán dadas. El plebiscito será el punto de inflexión a partir del cual podremos emprender un nuevo camino. Va a ser un mensaje poderoso de los ciudadanos a todo el mundo político, para cambiar el rumbo.
El académico y analista político, Kenneth Bunker, dice que “si Kast ofrece efectividad para resolver los problemas de los chilenos, Matthei ofrece estabilidad al país, un equipo profesional, con más experiencia y más transversal, pero al mismo tiempo un equipo que se podría demorar demasiado en resolver los asuntos políticos urgentes”.
El economista Patricio Rojas señala que urge activar proyectos de corto plazo para reactivar la inversión y el empleo. Dice que cualquiera que sea el gobierno que asuma en marzo de 2026 deberá implementar un programa de incentivos para reactivar la inversión.
A 50 años de la planta de celulosa en Constitución, Charles Kimber -gerente corporativo de Personas y Sustentabilidad de Arauco- repasa el rol que ha tenido en el desarrollo de la ciudad, las perspectivas de inversión en Chile, el avance del proyecto en Brasil y la necesidad de un “cambio radical” en materia de permisos […]
Doctorado en Chicago, en 1982 Rolf Lüders asumió como biministro de Economía y Hacienda en plena crisis económica. En el plano docente ha tenido unos 10 mil alumnos en la UC, que le dio el Premio Trayectoria Ingeniería Comercial. En la siguiente entrevista afirma que el acercamiento impulsado por Gabriel Boric a los Brics, liderado […]
Jorge Quiroz asumió la coordinación económica del programa de Gobierno del candidato del Partido Republicano, José Antonio Kast. En su primera entrevista en el cargo, Quiroz recalca la urgencia y los pilares de la propuesta de Kast que busca “el despegue” de Chile tras más de 10 años de decadencia económica.