Los cambios del programa económico de Boric, el acelerado trabajo para aterrizarlo y los nudos pendientes

Alex von Baer
El candidato presidencial FA-PC Gabriel Boric, al lanzar el proceso participativo sobre su programa de gobierno. Foto: Agencia Uno

Justo cuando a Boric se le abrió un flanco por la viabilidad y efectos en la inversión de su programa, su equipo económico está aterrizando cómo implementar las medidas, con ajustes, más gradualidad y rediseños del financiamiento. “Estamos trabajando un plan con el suficiente detalle para partir con ruta clara si somos electos”, explica Nicolás Grau, asesor económico. El trabajo se aceleró a medida que se acrecentó la opción de llegar a La Moneda: se hizo necesario zanjar indefiniciones en relación a cómo implementar el programa, entre equipos con poca experiencia de gobierno.

Por qué importa: Se trata de resolver las dudas sobre cómo se implementaría la propuesta de Gobierno del candidato que mantiene amplia ventaja en encuestas, caracterizada por cambios radicales, para los que Boric ha intentado comprometer certidumbre y gobernabilidad, moderando su discurso y abriéndose a consensuar medidas.

  • Algunos ejes: reforma tributaria de 8,5% del PIB en 8 años, terminar con las AFP, jornada de 40 horas, limitar despidos, transformación de la producción con fuerte rol del Estado, salud pública gratuita y 50% de trabajadores en directorios.
  • Economistas han expresado dudas de la viabilidad y financiamiento del programa – advierten que la reforma tributaria no recaudaría lo esperado-, y alertado sobre efectos en la inversión. “Por supuesto que me preocupa”, admitió Boric en Bloomberg, reconociendo el flanco sobre el temor de inversionistas a su programa.

Qué significa: El comando de Boric está en fase de ajustes al programa. Hasta su arrollador triunfo en primarias sobre Jadue, su programa estaba centrado en levantar banderas (su candidatura había nacido para revitalizar al FA) y tras su triunfo la idea era tener un programa más movible para adaptar a la coyuntura; pero luego constataron -explican en el comando- que ese diseño ya no resiste para un favorito para llegar a La Moneda, que empieza a rendir examen de gobernabilidad en debates y entrevistas.

  • “Ya no podemos prometer lo que no se pueda cumplir, no se puede hacer todo en 4 años”, fue el mensaje de Boric a sus equipos, tras ganar la primaria.
  • Hace 2 semanas, hubo una tensa reunión de equipos programáticos: hubo reclamos por la dilación en definiciones, afirman presentes. Quedó atrás así la idea de un programa que le permitiera moverse con flexibilidad para que su estrategia de ampliarse hacia el electorado moderada no le significara perder votos del PC.
  • De todos modos, la mayoría de los nudos con los comunistas ya se zanjaron. “El programa de Jadue y de Gabriel eran muy parecidos”, ha dicho Grau.

Lo que ya cambió: Han sido más detalles que cosas sustantivas: gradualizar medidas, revisar financiamientos que no del todo sustentados, la transición al nuevo sistema de pensiones, y matizar cifras y procedimientos.

  • “Nuestro foco está en que si salimos electos, esté bien hecho el diseño. Estamos trabajando en un plan de gobierno con el suficiente nivel de detalles para partir inmediatamente con ruta muy clara. Pero las cosas gruesas no cambian”, dice Grau a Ex-Ante. Algunos precisiones ya definidas son:
  1. Ajustes en costo: en una exposición en el CEP, Grau cifró el gasto fiscal en 8% del PIB en 8 años: unos US$ 22.500 millones, según cifras dadas por Boric. Antes el costo era US$ 26 mil millones. La investigadora CEP Sylvia Eyzaguirre le cuestionó el cálculo: dijo que en verdad el programa costaba 11,7% del PIB.
  2. Aterrizan recaudación tributaria: se ajustó la expectativa de recaudación de algunas medidas. “Antes decíamos que por evasión recaudaríamos 3,5% del PIB y ahora estamos diciendo 2,5%”, explica Grau. El impuesto de súper ricos se ajustó de 2% a 1,5%. El resto es exenciones, royalty, impuesto a la renta, entre otros.
  3. Reparto en pensiones y ahorros actuales: se terminan las AFP y la nueva cotización de 18%, administrada por un ente estatal, se ahorra en un fondo colectivo. Pero se ajustaron cifras y la estructura, revelados por Grau: la pensión básica será de $250 mil (de cargo fiscal), y el 40% de esos 18 puntos irán a un fondo de reparto para solidaridad y el resto a un fondo cd capitalización colectiva, donde una cuenta nocional registra cuánto ha aportado cada afiliado para retribuírselo al pensionarse (la propiedad jurídica de los fondos ya no es de las personas). Boric agregó las personas podrán decidir quedarse en el sistema actual, aunque es más discursivo: es solo para sus fondos actuales. “Las cotizaciones futuras van todas al nuevo sistema. Si permites que unos coticen en un sistema y otros en otro, los de altos ingresos se quedarán, y solo los de ingresos bajos irán al sistema solidario”, explica Grau.
  4. Medidas más graduales: por ejemplo: aunque no está zanjado, una idea es que el Sistema Nacional de Cuidados (red de apoyo a dueñas de casa, niños, adultos mayores y sectores vulnerables) parta al 4to año de gobierno, en vez del 1ro: en los primeros años, la recaudación tributaria no sería suficiente.
  5. Paridad en directorios y revisión de acuerdos comerciales: en ambas han expresado flexibilidades o matices. Grau dijo en entrevista con Sebastián Edwards que se abría a bajar del 50% al 30% la presencia de trabajadores en directorios; y que la revisión de acuerdos comerciales no será unilateral sino en acuerdo con los países.

Los nudos pendientes: Algunas de las áreas en que aún hay vacíos:

  1. Destino de ahorros actuales de AFP: no está zanjado que sucederá con esos fondos para quienes elijan no pasarlos al nuevo sistema; o sea, si los seguirán administrando las AFP. “Va a haber un período de transición donde se va a permitir aquello, pero las AFP van a desaparecer”, dijo Boric en Mesa Central de T13, pero en la misma noche Grau aseveró en Tolerancia Cero: “Se va a poder quedar en la AFP, no sé si con el mismo nombre”. La duda del equipo económico es si vale la pena exponerse a los efectos financieros de derribar por completo una industria de la magnitud de las AFP, cuando igual no tendrán un rol en el nuevo sistema.
  2. Financiamiento pensión básica: por ahora la definición es que el Estado cubra los $250 mil íntegros para toda la población. Los economistas de Boric pusieron sobre la mesa la idea que el Estado solo complemente lo que le falte a las personas para llegar a ese monto, para acotar los recursos fiscales. Grau ha dicho que esa opción sigue abierta, pero los economistas PC (Fernando Carmona y Javiera Petersen) se opusieron, por considerarlo una morigeración del programa.
  3. Financiamiento de Salud: está pendiente -afirman en el comando- cubrir el costo fiscal de la transición de las Isapres al Seguro Único de Salud (con coberturas iguales para todos). Es una propuesta que Boric introducirá pronto en agenda, ante la constatación de que la realidad pospandemia que enfrentará el próximo gobierno hará implosionar el sistema por el atraso en listas de espera.
  4. Rol del Banco Central: la materia quedó abierta: aunque el argumento es que será decisión de la Convención, de fondo están las profundas diferencias con el PC (partidario de intervenir al BC).

Lo que viene: Boric presentará su programa definitivo a 4 semanas de las elecciones del 21/11: a fines de octubre, dijo Grau, tras un proceso participativo. A futuro, el trabajo se orientará en intensificar los puentes con personas que han tenido experiencia de gobierno, reveló Grau, admitiendo la menor experiencia de los equipos económicos FA.

  • “Es claro que dada la dificultad de lo que queremos hacer, tenemos que estar abiertos a trabajar con gente que ha tenido otras visiones. Las cosas que estamos proponiendo se han hecho antes, las hemos estudiado, somos gente bien preparada. Pero también somos conscientes de que nos falta experiencia”, dijo Grau en Tolerancia Cero.

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