Son dos horas de suspenso, pero tan bien calibrado que uno no sabe exactamente cuándo es que se puede quedar sin respiración. No se trata solo de que la tensión vaya in crescendo —que también— sino que hay hilos de historias secundarias que se entrecruzan con el relato principal de tal forma que la inquietud ya instalada en el espectador crece geométricamente.
Por de pronto El Ángel de la Muerte comienza y se desarrolla en buena parte del metraje en una UTI. Un lugar donde la vida y la muerte se juegan una partida de ajedrez, donde todo es ir de allá para acá. Y la cámara rápida de Tobias Lindholm nos captura para instalarnos en medio de ese ajetreo de enfermeros, médicos, auxiliares, que van de un lado a otro revisando máquinas, jeringas, bolsas, y que igual se aproximan con afecto y serenidad a esos pacientes vulnerables.
La primera escena transcurre en un Hospital de Pennsylvania en 1996: la cámara espía desde afuera del box, desde donde se ven solo las piernas de un hombre en la camilla moviéndose sin control. Se activan todas las alarmas y las carreras del personal se desatan; pero no hay caso. Por el costado del encuadre y en semi penumbra, se aleja Charlie Cullen (Eddie Redmayne).
2003. Hospital en New Jersey. Amy Loughren (Jessica Chastain), una enfermera dedicada y amorosa con sus pacientes, atiende a una mujer mayor, acompañada por su acongojado marido. Su jefa le informa que cuentan con un chico nuevo para el turno de noche: doble alivio para ella. Amy tiene serios problemas de salud que esconde a sus superiores y dos niñas pequeñas en casa, enojadas por las ausencias de mamá. El chico nuevo resulta ser Charlie: de modos suaves, afectuoso, comprensivo, no solo termina congeniando con Amy sino desarrollando una linda amistad. Amy es una mujer que debe lidiar sola con su hogar y su enfermedad: no puede perder ese duro trabajo que sabe realizar tan bien. Charlie se convierte en su apoyo.
Los hechos se van precipitando tras una primera muerte inesperada en el hospital. Lindholm cruza hábilmente hechos, sospechas, temores, sorprendentes hallazgos que van armando un tenebroso puzzle que a cada cierto trecho parece no tener salida. Perfecta mezcla de drama humano, misterio y thriller policial, no suelta al espectador.
Basada en el libro de investigación “The Good Nurse. A True Story of Medicine, Madness and Murder”, de Charles Graeber. Extraordinarias actuaciones de dos ganadores del Oscar.
El Ángel de la Muerte (The Good Nurse)
Para quienes admiramos “al más grande cineasta de Polonia” (que ya es harto decir) es emocionante encontrarse con esta película que funciona como un espejo. Andrzej Wajda (Katyn, 2007) presentó Los Últimos Años del Artista: Afterimage en la Sección Oficial del Festival de Toronto en 2016. Al mes siguiente, a los 90 años, fallecería. Había estudiado pintura en la Academia de Bellas Artes de Cracovia antes de ingresar en la Escuela de Cine de Łódź.
Esta película se focaliza en los últimos años de vida del pintor vanguardista polaco Wladyslaw Strzeminski, perseguido por el régimen comunista (tal como el director). Respetado y querido maestro, había fundado en 1934 el segundo Museo de Arte Moderno del mundo. Había aprendido a pintar después de que le fuera amputada una pierna y un brazo tras la Primera Guerra Mundial.
Cuando la URSS posa sus garras sobre Polonia en 1948, Strzeminski se niega a seguir las órdenes del Partido que decide que todo debe estar supeditado al “realismo social”. Incluido el arte. La imagen con que abre el filme es elocuente: un inmenso telón rojo con la figura de Stalin va cubriendo el edificio y tiñendo de ese color el desangelado departamento donde está el pintor. Allí mismo, con precisión y lentitud, Strzeminski rasga el lienzo para espanto de los uniformados que están supervigilando la labor.
De ahí en adelante, con terquedad aunque sin arrestos heroicos, irá sufriendo las consecuencias de negarse a seguir los dictámenes del Partido. Todo esto escenificado desde la más kafkiana burocracia. “¿Por qué no quiere sumarse a los cambios?”, le pregunta un funcionario/académico.
Aunque acompañado por algunos discípulos, su decadencia es inexorable. Nada que doblegara su parca tenacidad. Directo y escueto, Wajda no filma ni un cuadro demás: las imágenes, los colores, la iluminación son elocuentes; los diálogos breves y como cuchillos. El personaje de su hija, una escolar de una madurez forzada por las circunstancias, es de aquellos inolvidables. Personaje y metáfora a la vez, asistirá, también sin mayores aspavientos, a los funerales de su madre primero y luego de su padre.
El cineasta y el pintor fueron símbolos de resistencia ante la tiranía oficial.
DATO: Afterimage se refiere a la Teoría de la Visión que desarrolló Strzemiński. De acuerdo a ella, el ojo retiene una imagen que nunca será una versión exacta de la realidad (como pretendía el Realismo Social), sino que estará determinada por el carácter, la percepción y las emociones del artista.
Afterimage: Los últimos años del artista (Powidoki)
Si no alcanzaron a verla cuando pasó por cartelera, esta vez no la dejen pasar.
Kenneth Branagh entrega su más personal y emotivo relato, situado en el Belfast de 1969, en ese barrio obrero donde vivió su infancia junto a su familia y compañeros de colegio. En ese preciso instante histórico donde todo estaba a punto de estallar, cuando aún el vecindario era una gran familia, no importando si el de la puerta del lado era protestante o católico.
Filmada en blanco y negro (el color aparece cuando los personajes van al cine o al teatro) la historia sigue a este grupo de vecinos que mantienen una estrecha y alegre convivencia. Hasta que aparecen los grupos violentistas.
Narrada principalmente desde la perspectiva de un niño, que ha crecido en una familia cariñosa, con los abuelos en la casita del lado, y jugando pichanga con sus amigos, la música de Van Morrison es uno de los elementos claves en este viaje profundamente emotivo. ¡Entrañable! Oscar 2022 al Mejor Guion.
Belfast
Además de dirigir algunos episodios de la serie Mindhunter (Netflix) y toda la miniserie The Investigation (HBO), Lindholm fue el coguionista de la ganadora del Oscar 2021 a Mejor Filme Internacional Another Round y de La Cacería, ambas dirigidas por Thomas Vinterberg y protagonizadas por Mads Mikkelsen.
Cuatro profesores de secundaria en Dinamarca deciden probar “la teoría del 0.5% de alcohol”. De acuerdo a ella, el cuerpo necesitaría ese porcentaje para liberar la creatividad, rendir mejor en el trabajo y estar más desinhibido.
Martin (Mads Mikkelsen) y sus tres mejores amigos, Tommy (Thomas Bo Larsen), Nikola (Magnus Millang) y Peter (Lars Ranthe) en realidad están atravesando la crisis de los 40, desde sus distintas vidas ya formadas. Algunos cargando frustraciones y/o sueños rotos; o inquietudes sepultadas por la ramplona realidad.
En un país donde el alcoholismo es un tema, la película abre con un rito tradicional en que un grupo de jóvenes celebran el fin de sus estudios con danzas, cánticos y sobre todo mucha bebida etílica, pasando por plazas, calles, bosques. La película sigue a estos cuatro maestros mientras van desarrollando su experimento. Este consumo sistemático es supuestamente controlado. La idea es observar sus efectos e ir anotándolos en una suerte de bitácora.
El “estudio” destapa en cada uno de ellos pulsiones, emociones larvadas y otras reacciones no previstas que provocan consecuencias muy distintas para unos y otros. Another Round es un drama con muchos toques de humor (y unas gotas de tragedia) que escarba en aquello que solemos barrer debajo de la alfombra, pero que inexorablemente emerge en algún momento. Ese es el proceso que filma genialmente Thomas Vinterberg, en un grandioso trabajo de imágenes y encuadres.
La secuencia final (que cierra con un plano detenido) es de aquellas que pasarán a lo inolvidable del cine. Aunque tiene su lado oscuro, la película no juzga a sus personajes. Es más, el cuarteto genera una empatía indiscutible. En ello, el aporte del elenco es clave. Mads Mikkelsen es asombroso: sin estridencias, su personaje va evidenciando hasta físicamente los cambios que experimenta a lo largo del filme.
Another round/ Druk
Para saber qué ver en cines y por streaming, no te pierdas el recomendado semanal de Ana Josefa Silva en Ex-Ante.
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