El proyecto de reforma a la Ley 19.300, que busca modernizar el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) en Chile, está estancado desde enero de 2025 en la Comisión de Hacienda del Senado. A pesar de ser un eje clave de la agenda de la ministra Maisa Rojas para mejorar la inversión y la gestión ambiental en el país, la iniciativa enfrenta múltiples obstáculos que retrasan su avance hacia la votación en la Sala del Senado y luego su tramitación en la Cámara de Diputados.
Qué observar. Desde enero de 2025, la reforma a la Ley 19.300 de Bases Generales del Medio Ambiente, que busca modernizar el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA), permanece en la Comisión de Hacienda del Senado. El proyecto, catalogado por los expertos como uno de los principales obstáculos para el desarrollo de inversiones en Chile, no ha avanzado con la velocidad que esperaba el Gobierno y el sector empresarial manteniendo un retraso que sigue perjudicando a los proyectos de inversión.
- Este proyecto presentado por el Gobierno en enero de 2024 sólo ha avanzado en su tramitación en la comisión de Medio Ambiente del Senado, por donde fue ingresado por el Gobierno, por lo que le falta salir de Hacienda, luego irse a la Sala y de ahí pasar a la Cámara de Diputados.
- El Ejecutivo había depositado grandes expectativas en la reforma, que busca hacer el SEIA más eficiente y menos politizado, y que promete ser un cambio fundamental en la forma en que se evalúan y gestionan los proyectos que afectan al medio ambiente en el país.
- En enero, la ministra del Medio Ambiente, Maisa Rojas, expresó su satisfacción por el despacho de la iniciativa aunque en sus palabras queda de manifiesto que no todas las modificaciones efectuadas por la Comisión que encabezó el senador Sergio Gahona (UDI) fueron de su agrado. “Con algunas cosas me quedo contenta, con otras no tanto”, dijo.
- Desde la comisión de Hacienda, que encabeza el senador Felipe Kast (Evópoli) señalan que el proyecto de ley solo tiene urgencia simple por lo que se están priorizando otros proyectos como el de fraccionamiento que tiene discusión inmediata.
- La reforma al SEIA es el tercer intento de modificación de la Ley 19.300 en casi una década. La ley fue promulgada en 1994 y ha sido considerada obsoleta por los expertos, dado que no ha logrado adaptarse a los cambios en la realidad económica, social y medioambiental de Chile.
- Este es un problema recurrente, ya que en 2018 y 2019, los intentos previos de reforma fracasaron, lo que incrementó la presión para lograr finalmente una modificación efectiva.
Evaluación Ambiental 2.0. El proyecto de ley, denominado “Evaluación Ambiental 2.0”, fue ingresado al Congreso en enero de 2024, junto al ley Marco de Autorizaciones Sectoriales, conocido como el de permisología, y tiene como objetivo fundamental fortalecer la institucionalidad ambiental y hacer más eficiente el proceso de evaluación de los proyectos.
- La reforma también busca mejorar la certeza jurídica para los inversionistas, una necesidad urgente según varios sectores productivos del país, quienes destacan la lentitud y la incertidumbre que genera el sistema actual.
- La ministra Rojas destacó, en su presentación, que el principal propósito de la reforma es “disminuir los plazos y dar mayor certeza a las inversiones, en un contexto de cambio climático y crisis ambiental que exige de medidas urgentes”.
- Pero el camino aún es largo para terminar con su tramitación debido a que luego de ser visto por la Comisión de Hacienda del Senado deberá pasar a la Sala y de ahí seguir su trámite en la Cámara de Diputados. “No veo que tengamos una modificación en este Gobierno”, expresa un economista que ha seguido el detalle de la tramitación.
- Uno de los puntos más controversiales de la reforma fue la eliminación del Comité de Ministros, un órgano colegiado que revisaba las resoluciones de evaluación ambiental. La reforma propone que el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) sea el responsable de calificar los proyectos, de manera unipersonal, a través de su director ejecutivo o regional, sin intervención de autoridades políticas.
- Uno de los temas más controvertidos fue la eliminación del Registro de Consultores, que había sido propuesto para asegurar que los estudios de impacto ambiental fueran realizados de manera profesional y con altos estándares. La ministra Rojas lamentó que esta propuesta no quedara en el texto final, considerando que había sido clave para mejorar la calidad de los estudios y reducir las suspensiones de proyectos por problemas en la evaluación.
Los actores. El presidente de la comisión de Medio Ambiente, Sergio Gahona, manifiesta que esta reforma busca fortalecer la institucionalidad ambiental del país. “Entre sus principales avances destacan la eliminación de los permisos ambientales mixtos, la centralización de toda la evaluación ambiental en el SEIA, y una definición más clara sobre qué proyectos deben ingresar al sistema. Además, otorga carácter vinculante a las consultas de pertinencia y establece mecanismos para agilizar la evaluación de proyectos urgentes, sin rebajar los estándares de protección”, explica.
- Gahona asegura que “la expectativa es que en su tramitación futura se sigan perfeccionando aspectos clave para reducir algunos plazos que aún persisten y otorgar mayor certeza jurídica a todos los actores involucrados”.
- Desde el Ministerio de Media Ambiente señalan que “este proyecto de ley es una muestra concreta que estamos trabajando con el objetivo de hacer más eficiente la evaluación ambiental de los proyectos de inversión”.
- Agregan que “es un proyecto que pasó su tramitación en el Senado con un apoyo transversal y existe consenso en la importancia de que siga avanzando”.
Un futuro incierto. Aunque el proyecto de reforma al SEIA sigue avanzando lentamente, aún quedan varios obstáculos por superar. El debate sobre la transparencia, la participación ciudadana y la despolitización del sistema son cruciales y temas de debate en un año electoral.
- En su análisis del proyecto el CEP había advertido que “no proporciona un marco comprensivo para desarrollar una evaluación ambiental más técnica, simple y eficiente. Tampoco favorece una menor interferencia política y judicial en su etapa terminal ni proporciona cambios significativos respecto de las autorizaciones ambientales. Por el contrario, solo fortalece el rol del Servicio de Evaluación Ambiental y la participación ciudadana.
- El investigador del CEP, Tomás de la Maza, asegura que “no es claro cómo conversará el proyecto de ley marco de autorizaciones sectoriales y la nueva institucionalidad asociada al mismo, con el de Evaluación Ambiental 2.0”.
- Advierte que si bien el primero tiene algunos aspectos positivos, su impacto estará limitado por su carácter sectorial, cuando muchos proyectos de inversión y, en particular los grandes proyectos deben someterse al SEIA. “Hace falta una mirada global que integre el resguardo de los distintos bienes jurídicos, ambientales y sectoriales, y simplifique los procesos necesarios para desarrollar proyectos sustentables”, dijo.