En un seminario en la UDD, la ex Presidenta marcó cierta distancia de la propuesta de la Convención Constituyente que ella apoyó en 2022 y abordó los cambios que a su juicio deben realizarse al sistema político, luego de que en su segunda administración se cambiara de un sistema binominal a uno proporcional y el número de partidos se elevara de 14 a 32 solo dos años después de promulgada.
El despliegue de Bachelet. Una semana después de que la encuesta CEP la posicionara como la segunda figura política mejor evaluada, con un 45%, la expresidenta Bachelet participó en el seminario “Reflexiones sobre el panorama político en la recta final de las elecciones municipales”, organizado por la Facultad de Gobierno de la Universidad del Desarrollo.
- No es la primera actividad pública a la que Bachelet asiste esta semana. El miércoles dio una charla en la Universidad de Talca sobre los “Desafíos de la Educación Pública” en la que sostuvo que “la política está harto tóxica” y que Chile vive un “retroceso democrático”.
- La exmandataria se ha desplegado en apoyo a los candidatos del pacto Contigo Chile Mejor a las elecciones municipales y regionales, sacándose fotos con ellos, asistiendo a actos de campaña y preparando un manual para gobiernos locales.
- Todo apunta a que el FA -y el Presidente Boric- son partidarios de que Bachelet compita en las próximas presidenciales, ya que, ganando o perdiendo, Boric quedaría perfilado para los próximos comicios. Hasta ahora ella ha dicho que no es candidata, pero lo mismo dijo antes de su segunda campaña para llegar a La Moneda.
Sistema político. Uno de los temas que abordó la exmandataria durante el seminario de la UDD fue la reforma al sistema político, uno de los aspectos clave para el empresariado y parte de la clase política para dar gobernabilidad al país, luego de la atomización que se ha instalado en el Parlamento y su correlato en la dificultad para llegar a acuerdos. Actualmente existen 30 partidos en el país, 22 constituidos legalmente, tres en formación y cinco en trámite ante el Servicio Electoral.
- “No hay problema con que la gente sea independiente. El problema cuando la gente no tiene una cierta filiación, o es electa bajo un cierto partido político y después se enoja y se sale del partido, y después responde a sí mismo. Por eso, hay un acuerdo transversal en las fuerzas políticas de hacer un cambio al régimen político”, dijo la ex Presidenta.
- También se mostró partidaria de que quien renuncie a un partido pierda el escaño que ocupaba en el Senado o la Cámara de Diputados: “Hay un desorden muy fuerte en lo parlamentario, que hace que muchos partidos sientan que hay que cambiar el régimen”.
- Sobre la fragmentación de los partidos afirmó: “Me han criticado a mí, dicen que es culpa mía esto. Pero uno está acostumbrado cuando ha sido Presidente de que uno siempre es culpable de todo. Cuando uno tiene un cargo de representación tiene que responder a esto”.
- “Yo mandé la propuesta de cambio de régimen político, porque efectivamente el binominal no era un sistema realmente democrático. Era un sistema que tenía falencias. Pero, al cambiar el sistema, se ha generado esta fragmentación, y eso hay que corregirlo”.
Por qué importa. El cambio al sistema electoral fue una de las principales reformas del segundo mandato de Bachelet, quien promulgó el fin del binominal el 27 de abril de 2015.
- Este nuevo sistema aumentó la cantidad de diputados de 120 a 155 bajo el argumento de mejorar la representatividad; los senadores pasaron de 38 a 50.
- Con el sistema binominal, los candidatos a la Cámara de Diputados sin partido o no pertenecientes a un pacto debían juntar cerca del 30% de los votos para ganar la elección.
- Con la reforma electoral de Bachelet este número descendió a 25% en los distritos de 3 diputados; a 20% en los de 4; a 17% en los de 5; a 15% en los de 6; a 13% en los de 7, y a 11% en los de 8 diputados.
- En 2016, tras el cambio en el sistema, el número de partidos políticos legalizados se duplicó, pasando de 14 a 32, lo que generó una importante fragmentación en el Congreso.
- Se trata de uno de los flancos con que la oposición suele criticar a la ex Presidenta respecto de su segundo período en La Moneda.
- Hoy La Moneda busca cambiar el sistema, para lo cual existen diversas conversaciones para enviar un proyecto de ley al Parlamento entre diciembre y enero próximo.
Sus críticas al primer proceso constitucional. La ex Presidenta participó en la campaña del Apruebo en 2022 y expresó entonces que la propuesta de nueva Constitución elaborada por la Convención Constitucional “no es perfecta, más se acerca a lo que yo siempre soñé”. Este viernes tomó cierta distancia del proceso constitucional surgido tras el estallido.
- “Se generó una impresión que una nueva Constitución iba a resolverlo todo, y todos sabemos que eso no es así”.
- “Hoy no hay ningún apetito por el tema. No hay apetito ni hay tiempos. Este año tenemos las municipales, el próximo año las parlamentarias y presidenciales, no hay tiempos”.
- “Si después del próximo año, pasado eso, puede haber nuevamente un cierto apetito de cambio de la Constitución, puede ser, pero la gente quedó un poquito podrida con los procesos”.
- “Hubo mucho independiente, gente sin mucha experiencia política y hubo una tentación de hacer una Constitución súper amplia (…) fue súper ambiciosa, y no hubo la capacidad de llegar a ciertos acuerdos mínimos”.
- Más tarde abordó también el segundo proceso constitucional, conducido en los hechos por el Partido Republicano.
- “Fue un tremendo error del segundo ejercicio repetir lo que había pasado en el primer ejercicio, sólo que de otro color político. Entonces yo creo que la gente quedó aburrida”.
Mirada del 18-O. A una semana del quinto aniversario del estallido, la exmandataria marcó varias posiciones respecto de lo que ocurrió en octubre de 2019.
- “Hubo 80 países donde la gente salió a las calles, por distintas temáticas, pero yo identifiqué dos fundamentales: la gente no estaba contenta con la democracia (…) y no estaban contentas con los modelos económicos existentes”.
- “En el caso de nuestro país, había descontento social, económico, y probablemente, muchas de estas cosas venían de antes. ¿Entonces por qué no se produjo antes esto? Mi impresión es que tampoco hubo un manejo adecuado de la situación. Se tomaron algunas decisiones que creo que no fueran las más adecuadas”.
- “Yo conversé con el presidente Piñera varias veces durante ese periodo por teléfono. Él me llamaba, conversábamos, le di algunas recomendaciones. Si él siguió o no siguió esas sugerencias, cosa de él. Yo pensaba que era importante que aunque uno pueda tener miradas distintas, lo importante es el país”.
- “Hay muchos de estos temas que no están resueltos hoy día todavía, pero es porque son difíciles, no son temas que se resuelvan de un día para otro”.