El hecho de que el presidente de la UDI hablara de “reparto” en materia de pensiones abrió una controversia en momentos clave de la discusión de la reforma. Este martes, Ramírez debió retractarse, y el ministro Marcel afirmó que el acuerdo en el Senado es inminente para un proyecto que debiera votarse en enero.
Qué observar. El diputado y presidente de la UDI, Guillermo Ramírez, estuvo en el centro de la polémica luego de afirmar este lunes, en Radio Agricultura, que “el único reparto —lo votamos a favor hace un año— que para nosotros es aceptable es la parte de la cotización que va a igualar pensiones entre hombres y mujeres. Ese es el reparto que consideramos que es justo: de los 6 puntos adicionales, alrededor de 0,5”.
- Un día después, y tras una arremetida del Partido Republicano —que incluyó tuits del presidente de la colectividad, Arturo Squella, y de su fundador José Antonio Kast—, Ramírez reconoció que utilizó incorrectamente el término para referirse a este mecanismo, aclarando que la palabra adecuada es “compensación”, y señaló que existen diversas fórmulas para lograr esta equidad.
- Durante esta jornada, en un seminario de la Bolsa Electrónica, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, sostuvo que “nunca hemos estado tan cerca de un acuerdo, pero siempre es importante la puntada final”.
La fórmula que se negocia en el Congreso. Según fuentes parlamentarias, el mecanismo que se está consensuando en la comisión de Trabajo del Senado —de mayoría opositora— para el destino de los 6 puntos de cotización adicional contempla que un 4,5 vayan directamente a cuentas individuales.
- De los 1,5 puntos restantes, se evalúa que un 0,5 se utilice para compensar la brecha de género, y 1 se destine a un sistema de préstamo reembolsable, que contablemente pertenece a los cotizantes.
- Este último punto genera controversia en la oposición por el impacto fiscal que podría tener el préstamo reembolsable, considerando que la deuda pública de Chile se aproxima al 40% del PIB, en los límites que el propio Gobierno ha expresado como máximo.
- Una consecuencia directa, dicen los expertos, es que el Estado tendría que emitir bonos que compensen ese préstamo lo que incrementaría la deuda pública afectando la clasificación de riesgo del país.
- En agosto, la comisión, en conjunto con el Ejecutivo, acordó un protocolo que establece plazos para la discusión y votación de la reforma con el objetivo de despacharlo en enero de 2025.
El lapsus. El análisis en la interna de Chile Vamos es que al aludir al reparto y referirse al 0,5%, el presidente de la UDI, Guillermo Ramírez, dejó al descubierto una negociación en curso entre el ministro Marcel y diversas fuerzas políticas con límites aún más amplios.
- En el sector ha generado molestia que la propuesta transmitida por Ramírez sea vista como una postura de todos los integrantes de Chile Vamos, cuando existen diferencias al interior de cada partido del bloque. Las negociaciones las encabezan los integrantes de la comisión de Trabajo del Senado, Juan Antonio Coloma (UDI), Rodrigo Galilea (RN) y Luciano Cruz-Coke (Evópoli). Sin embargo, varios parlamentarios se han ido descolgando de una postura que consideran condescendiente con el Gobierno, ya que no quieren otorgarle un triunfo respaldando una reforma que no tiene apoyo ciudadano según las encuestas.
- Miembros de la bancada de diputados gremialistas señalan que no están las condiciones para alcanzar acuerdos con el Gobierno, y menos cediendo en aspectos relacionados con el ideario del sector. “Todas las veces que hemos cedido, hemos salido derrotados”, sostiene un parlamentario.
- Eso explicaría —aseguran personeros opositores— la ofensiva republicana de transmitir con fuerza que no respaldarán ningún punto para reparto y que se mantendrán firmes en que los 6 puntos de cotización adicional vayan a cuentas individuales. Con esto, buscan diferenciarse de Chile Vamos y apelar a su electorado más duro.
- Dado este escenario —dicen figuras del bloque— ceder en un acuerdo previsional podría redundar en un castigo para Chile Vamos en las próximas elecciones parlamentarias, sobre todo para la UDI y RN, que disputan su base de apoyo con Republicanos.
Las señales de Marcel. Este martes, el jefe de la billetera fiscal se mostró optimista frente a la tramitación de la reforma de pensiones, sosteniendo que “nunca hemos estado tan cerca de llegar a un acuerdo”. Marcel enfatizó que “cada día, semana y mes que pasa sin iniciar una reforma al sistema de pensiones implica un costo no sólo para los pensionados, también para el mercado de capitales”.
- Uno de los temas más discutidos en la negociación ha sido el uso del 6% de cotización adicional. Al respecto, Marcel reconoció que “una fracción pequeña” estará destinada a compensar las diferencias. “Lo que estamos discutiendo es qué fracción debería destinarse a cubrir riesgos que no son posibles de autofinanciar o autoasegurar”, dijo en un seminario de la Bolsa Electrónica.
- Ramírez, por su parte, señaló que “es necesario igualar las pensiones de hombres y mujeres. Dos personas con el mismo ahorro que jubilan a la misma edad deben tener la misma pensión. No es justo que haya diferencias por una condición como la condición de mujer”.
- Esto responde a una de las principales críticas al sistema actual, donde las mujeres enfrentan menores montos de jubilación debido a factores como la brecha salarial y la mayor esperanza de vida. En ese sentido, el diputado destacó que el 0,5% busca corregir la desigualdad en pensiones entre géneros sin afectar el principio de capitalización individual.
- Pese a ello, en Chile Vamos afirman que cualquier acuerdo pasa, primero, por un acercamiento de posiciones sobre cómo financiar ese porcentaje, cuestión que no está zanjada.