El abogado fue electo esta tarde por sus pares y asumirá la presidencia del tribunal hasta marzo, cuando termine su período en el TC. Se trata de la antesala de una cirugía mayor a la composición del organismo, que ese mismo mes -en momentos en que la Convención Constitucional defina el futuro de la entidad- deberá renovar a otros 3 de sus integrantes. La trayectoria de Juan José Romero, quien es hijo del senador Sergio Romero, ha estado marcada por el trabajo académico. Estuvo en contra del proyecto que penaliza el aborto por 3 causales y se le reconoce un estilo conciliador. Asumirá en reemplazo de María Luisa Brahm, cuya gestión ha estado marcada por una fuerte tensión entre los ministros del tribunal.
Presidencia de transición. Romero fue designado por el Congreso como ministro del Tribunal Constitucional (TC) el 6 de marzo de 2013 y su mandato termina el 6 de marzo del próximo año, por lo que solo ejercerá como presidente durante 6 meses.
Académico e introvertido. La trayectoria de Romero ha estado marcada por el trabajo académico.
Su fallo antiaborto. Es definido como católico y conservador. “Es de convicciones profundas”, dice un cercano, quien explica que Romero sostiene que la legitimidad de los fallos debe radicar en una buena argumentación, aún cuando se defienda una postura impopular.
El VAR. Lo cierto es que esa rivalidad se hizo evidente en agosto de 2019. Romero era el candidato natural para asumir la presidencia del tribunal, en reemplazo de Iván Aróstica, pero Brahm logró quedarse con el cargo con el apoyo de ministros ligados a la ex Concertación y de visión progresista.
Curriculum. Abogado de la UC. Doctor en Derecho de la Universidad de Salamanca, España. Máster en Regulaciones del London School of Economics and Political Science, Inglaterra. Postitulado en Administración de Empresas de la UC.
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Siempre habrá movilizaciones y protestas -no sólo si gobierna la derecha-, y estará latente la posibilidad de que en algún momento converjan en algo masivo. Pero apostaría que difícilmente se darán las condiciones para excesos de violencia, por el descenso vertiginoso del apoyo social a todo lo que signifique desafiar el orden público.
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Gonzalo Müller, director del Centro de Políticas Públicas de la UDD, sostiene que en las primarias se ha visto polarización. “La primaria instaló el resurgimiento del discurso de la izquierda del tiempo del estallido y de la convención. Un tufillo a octubrismo volvió a dominar la escena”, dice.