Sistema político: La solución que nadie se atreve a proponer. Por Jorge Schaulsohn

Ex-Ante

Si se busca limitar el numero de partidos en el Congreso habría que terminar con los pactos electorales, lo que nadie propone simplemente porque no les conviene. Sin pactos no existirían los partidos “de bolsillo”, que logran elegir diputados con 1% o 2% de los votos. Por eso, el nuevo proyecto transversal de cambio al sistema político -que es necesario y tiene medidas positivas, como el umbral del 5%- no resuelve el problema de fondo.


Un asunto que hay que resolver. Nuestro sistema político adolece de grandes falencias que afectan la “gobernabilidad”, es decir la capacidad de un gobierno para ejercer el poder de manera efectiva, eficiente y legítima, así como para tomar decisiones e implementar políticas que satisfagan las necesidades de la sociedad.

  • Hace tiempo ya que hay un consenso amplio de que se trata de un asunto que hay que resolver.
  • Para resolverlo hay que diferenciar entre “gobernabilidad” y “gobernanza”. La gobernabilidad se enfoca en la capacidad del Estado para tomar decisiones de manera eficaz y oportuna; la gobernanza hace referencia al proceso de toma de decisiones que incluye a los tres poderes del Estado, a la sociedad civil y al sector privado.
  • En un sistema presidencial cuando el presidente no tiene mayoría en el Congreso se ve obligado a negociar con la oposición y hacer concesiones.
  • Para un gobernante es muy frustrante no poder hacer todo lo que quisiera y verse obligado a transar, lo que además le trae problemas con partidos de su propia coalición que no siempre quedan conformes con el resultado de la transacción.
  • El problema se ve exacerbado por la proliferación de pequeños partidos, muchos sin una ideología clara, que en virtud del sistema electoral que permite la existencia de pactos pueden sumar sus votos y transformarse en el fiel de la balanza.
  • Por eso hoy se habla de la “fragmentación”, un término sindicado como la principal causa de la entropía de nuestro sistema político.

Fenómeno con historia. Éste fenómeno no es nuevo en Chile, sino que mas bien todo lo contrario. Y puede ser virtuoso.

  • Entre 1931 y 1952 los partidos sufrieron grandes divisiones. De la división del Partido Conservador surgió la Falange Nacional, que en 1957 se convirtió en la Democracia Cristiana, que nos dio la Revolución en Libertad, el único proyecto exitoso de cambios estructurales en la historia de nuestra república.
  • En 1948 se aprobó la Ley de Defensa de la Democracia que ilegalizó al Partido Comunista. Surgieron el Partido Conservador Tradicionalista, el Partido Social Cristiano, el Partido Socialista Popular, el Radical Doctrinario, el Agrario Laborista. Entre 1957 y 1973, el MAPU y la Izquierda Cristiana, fruto de la división de la DC, la Izquierda Radical, El Partido Radical Social Demócrata.
  • En la mayoría de los casos estos partidos nacieron bajo el alero de diputados y senadores que renunciaron a los partidos bajo cuyas banderas habían sido electos.
  • El único período de nuestra historia en que no existió proliferación de partidos fue durante la vigencia del sistema binominal, que dejaba sin representación a un importante segmento de nuestra sociedad.

Coaliciones espurias. Hoy hay mas de 20 partidos con representación parlamentaria, pero el Congreso está dominado por dos bloques ideológicos bastante monolíticos, la derecha (ChileVamos-Republicanos) y la izquierda oficialista.

  • Por eso es que, en mi opinión, no existe una crisis de gobernabilidad: se acaba de aprobar la Ley del Presupuesto, el Royalty Minero, el Ministerio de Seguridad Pública, la jornada de 40 horas, el aumento del salario mínimo con ayuda del Estado, los tratados de libre comercio con la Unión Europea, la Ley de Isapre, por mencionar solo algunas.
  • Eso no quiere decir que el sistema político no necesita reformas, pero una cosa los desacuerdos ideológicos que impiden la aprobación de algunas leyes y otra la ingobernabilidad.
  • El estancamiento no se debe a la fragmentación, sino a la falta de acuerdo entre el bloque de izquierda y la derecha que tienen la mayoría de votos.
  • También influye la formación de coaliciones espurias y oportunistas entre partidos que tiene profundas diferencias ideológicas, como la que conviven, de muy mala manera, los comunistas y frenteamplistas con el denominado socialismo democrático.

Contrapesos. La pregunta es si es mejor para la democracia que un mismo partido o coalición de partidos controle tanto la presidencia de la república como el Congreso.

  • Para algunos, cuando un partido tiene el control del ejecutivo y del legislativo hay mas eficiencia y estabilidad.
  • Por otro lado, se produce una concentración excesiva de poderes en un solo sector que está en condiciones de imponer su agenda sin contrapesos de ningún tipo y disminuye la posibilidad de fiscalización opositora.
  • En los países con sistemas presidenciales es muy frecuente que exista un gobierno dividido en el que ambas o al menos una de las cámaras está bajo el control de la oposición. En Chile, la renovación parcial del Senado busca, precisamente preservar el equilibrio.
  • En nuestra historia reciente, con la excepción del gobierno de Eduardo Frei Montalva hemos tenido presidentes sin mayoría en el Congreso. En algunos casos como el de Jorge Alessandri la consiguió invitando al gobierno a partidos más de centro.
  • Y la experiencia no ha sido negativa. Gran cantidad de iniciativas de los gobiernos de minoría se terminan aprobando, con modificaciones. La diversidad de opiniones fortalece la democracia, aunque sea más lento.
  • Los momentos más dramáticos de ingobernabilidad en los últimos 30 años fueron los retiros. Pero la causa no fue la fragmentación, sino la indisciplina y el populismo en los partidos grandes, de derecha y de izquierda. Eso se materializó pasando a llevar la constitución con resquicios legales, lo que no veíamos desde la U.P.

Más díscolos. Un grupo de parlamentarios transversal ha vuelto a poner sobre la mesa un proyecto que cambia el sistema político, que pese a aspectos positivos -como el umbral del 5%-no resuelve el problema de fondo.

  • Se establece que el parlamentario que renuncia al partido pierde el escaño, para desincentivar la formación de nuevos partidos.
  • Con esa medida, la DC no se hubiese dividido, ya que las figuras principales de Demócratas son dos senadores y varios diputados en ejercicio que habrían perdido el cargo con la reforma que se propone.
  • Y nadie puede acusarlos de obstruccionistas: han reforzado la gobernabilidad porque es un partido más moderado que la DCque abandonaron. Es cierto que fortalecieron al bloque opositor, lo que en nada perjudica el funcionamiento de nuestra democracia.
  • Lo que se busca es proteger la sobrevivencia de los partidos que enfrentan disidencias internas. El parlamentario disidente que no se atreve a renunciar para no perder el cargo será un díscolo permanente, que dificultará los consensos.

La clave son los pactos electorales. Si se busca limitar el numero de partidos en el Congreso habría que terminar con los pactos electorales, lo que nadie propone porque no les conviene.

  • Son los pactos lo que permiten una multiplicidad de partidos “de bolsillo”, que logran elegir diputados con el 1% o el 2% de los votos, en virtud de la cifra repartidora, que sin capital político real llegan al Congreso.
  • La constitución de 1925 no los permitía. Cada partido tenía que sacar sus propios votos y los acuerdos para formar gobiernos se hacían después de la elección.
  • Sin pactos no existiría La Federación Verde Social, el PH ni Evópoli, el PC se reduciría a una mínima expresión,  el PPD sería más irrelevante y la DC no tendría parlamentarios.
  • El umbral del 5% es una buena idea, pero es tramposo. Exime del umbral al partido que, sin alcanzar el 5% tenga cuatro parlamentarios, contando a los senadores que no tenían reelección. ¡Un traje a la medida de lo que hay!
  • Por último, el proyecto asigna en forma arbitraria los votos obtenidos por el partido que no alcanza el umbral, ignorando la voluntad del elector.

Para más columnas, clic aquí.

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida por Ex-Ante (@exantecl)

Publicaciones relacionadas

Manuel Izquierdo P.

Diciembre 12, 2024

Quién es y qué piensa la encargada del programa laboral de Evelyn Matthei

La economista y master en Administración Pública de la Universidad de Columbia, María José Abud, fue la escogida por Evelyn Matthei para liderar el equipo que diseña su programa laboral, con énfasis en recuperación de empleo, mujeres y formalidad. Abud fue subsecretaria de la Mujer durante el segundo gobierno de Sebastián Piñera. Lea a continuación […]

Ex-Ante

Diciembre 12, 2024

La acusación de plagio contra Axel Kaiser, sus descargos y su conversación con el autor por mail

Kaiser junto a ejecutivos del Grupo Planeta enviaron un correo el miércoles al académico canadiense Gad Saat y su editorial, luego que este publicara en sus redes sociales que “me he enterado de que alguien ha cometido robo masivo de mi propiedad intelectual”. En el mail le explican que su obra “La mente parasitaria” de […]

Marcelo Soto

Diciembre 12, 2024

Álvaro Bellolio y propuesta de regularizar a 180 mil inmigrantes: “Este Gobierno busca privilegiar al migrante clandestino”

Ex director del Servicio Nacional de Migraciones y actual director de la Escuela de Gobierno de la U. Andrés Bello, Álvaro Bellolio critica fuertemente la propuesta del Gobierno de regularizar a 180 mil migrantes. “Premia la irresponsabilidad de quien ingresó ilegal. Y también premia a los empleadores que cometen abusos laborales con extranjeros sin papeles”, […]

Abogada y Presidenta de la Comisión de Probidad

Diciembre 12, 2024

Día contra la corrupción: hora de balances. Por María Jaraquemada

Crédito: Agencia Uno

Recientemente Chile Transparente publicó un tercer balance de las recomendaciones de la Comisión Asesora por el Caso Convenios donde se puede observar cómo éste se ha ralentizado. Si bien el gobierno ha ingresado proyectos -o propuestas de enmiendas- relevantes en la materia, su avance ha sido casi nulo.

Directora de Evidencia de Pivotes.

Diciembre 12, 2024

¿Empleo Público para quién? Por Elisa Cabezón

El gasto fiscal en Chile lleva años expandiéndose, mientras el sector privado, la fuente de este gasto, está estancado. Se debe cambiar esta inercia, y un buen punto de partida es ordenando la casa estatal a través de una regulación única, transparente y clara del empleo público, que evite que éste se convierta en una […]