Roberto Izikson y alza de Boric en las encuestas: “Está mucho más parecido a un ex presidente del PS que a uno del FA o el PC”

Roberto Izikson, gerente de Cadem, dice que a Boric le ha servido mucho salirse del tema constituyente para posicionarse en las encuestas, donde este domingo subió 8 puntos en su aprobación, pese a la derrota del Apruebo en el plebiscito. “Eso le ha permitido gobernar. Y de hecho creo que es interesante porque abocarse a la tarea de gobernar ha dejado, por ejemplo, a la derecha sin agenda”.

-¿Cómo ha cambiado el discurso de Boric? ¿Este cambio ha influido en que haya subido un poco en las encuestas?

-Yo creo que es evidente que es un Boric más parecido al de la segunda vuelta. Tiene una sintonía mucho mejor con la opinión pública que un Boric de primera vuelta. Y creo que desde la derrota en el plebiscito, hay un cambio de diagnóstico, hay un cambio de prioridades y también hay un cambio de tono y forma en el presidente.

Y la opinión pública lo ha comenzado a sentir. Esto parte con poner a la delincuencia como prioridad número uno; con su respaldo cerrado hacia Carabineros, con el cambio de Carolina Tohá y Ana Lya Uriarte y la relevancia que ellas están tomando en  el Congreso y en el debate político. Creo que evidentemente ese Gabriel Boric tiene una sintonía mucho más contundente con el sentir mayoritario de la opinión pública.

-¿Pero es un Boric socialdemócrata?

-Es un Boric mucho más parecido a un expresidente del Partido Socialista que a un presidente del Frente Amplio y el Partido Comunista. Para los gobiernos de centroizquierda, hacer propios los ejes de delincuencia y economía, nunca ha sido fácil. Son más bien agendas propias de un gobierno de centroderecha.

Y creo que ha ido encontrando un punto de equilibrio. Ahora, la gran pregunta es si este crecimieno de ocho puntos de aprobación logra ser consistente en el tiempo. Si es un cambio consistente es una buena noticia porque le permite al presidente empezar un 2023 con un nivel más normal de aprobación  y no con los niveles anteriores que lo tenían completamente perdido. O sea, la semana pasada llegó a -40 puntos de neto, que era algo que no había tenido un presidente en su primer año nunca.

-¿Cuáles son los factores que ayudaron a esta subida de ocho puntos en la última encuesta?

-Evidentemente, nunca es una sola causa. Probablemente lo mas influyente es la presentación de la reforma de pensiones. Y cómo el gobierno logró controlar la agenda a partir de ese tema. Con un despliegue completo de los medios de comunicación y frente a un sistema actual que la gente quiere cambiar.

Pero no es un debate de corto plazo, sino que es una maratón. Y vamos a ver si el Gobierno logra convencer a la opinión pública sobre los puntos relevantes donde no hay acuerdo. Pero al menos desde el punto de vista comunicacional lo ha hecho bien.

Hay que sumar ciertas cosas: el triunfo en la cámara, sorpresivo. Yo creo que en la acumulación de señales de un presidente que tiene un tono muy distinto frente a los hechos de delincuencia y su apoyo a Carabineros, que ya viene de varias semanas, también eso empieza a ayudar. El anuncio del viaje a La Araucanía también pudo haber sido positivo.

-¿Y también cierta humildad en el discurso? Por ejemplo, ayer dijo “otra cosa es con guitarra.” ¿Eso la ciudadanía lo premia?

-El cambio de tono y el discurso desde el plebiscito, también lo ha ayudado a separarse de forma definitiva del debate constituyente y dejarlo anidado en el Congreso. Ana Lya Uriarte decía que el Gobierno va a apoyar finalmente lo que decida el Congreso  sobre el proceso. Salirse de ahí le ha permitido gobernar. Y de hecho creo que es interesante porque abocarse a la tarea de gobernar ha dejado, por ejemplo, a la derecha en el proceso constituyente, alejada del día a día, sin agenda. La ausencia hoy día de la derecha es gigantesca.

-¿En la agenda?

-Claro, y eso lo ha aprovechado muy bien el gobierno que ha copado todos y cada uno de los espacios.

-¿Está dominando la agenda el gobierno? Antes se criticaba su incapacidad de hacerlo.

-El Gobierno logró volver a controlar la agenda a pesar de la derrota del plebiscito. Y eso es súper interesante porque, por ejemplo, a Sebastián Piñera no le ocurrió con el estallido social. Había un análisis que yo incluso podría haber compartido, que decía que la derrota del plebiscito iba a ser para Boric, lo que el estallido social fue para Piñera. Es decir, que todo se mueve al Congreso y el poder radica ahí. Y la verdad es que eso no ha sido así. El Gobierno ha logrado controlar la agenda. El plebiscito ha perdido relevancia, ha perdido atención, ha perdido dinamismo. Y por lo tanto el foco se moviliza hacia delincuencia, hacia economía, hacia pensiones, La Araucanía. Y el gobierno poco a poco ha ido logrando encontrar el tono y la forma y fondo. Interesante.

-Después de la cuenta pública también hubo un repunte, pero duró poco.

-Claro, fue solo espuma. Eso pasa con los cambios bruscos. Lo que queda para adelante, es saber si el Gobierno va a lograr mantener el control de la agenda y por lo tanto si va a generar un cambio estructural.

-En el tema constituyente, ¿la encuesta CADEM muestra que hay mayor consenso sobre el proceso?

-Antes lo que veíamos era mucha división, o sea, una falta de consenso desde la opinión pública sobre cómo debería seguir el proceso adelante. Sabemos que la gente quiere una nueva constitución, pero lo que no sabemos es qué significa eso.

Eso ha ido cambiando. La gente quiere un nuevo proceso y que sea mixto, mitad electo, mitad expertos. Que no sea 100% electo. Que no sea 100% de expertos. Quiere que la cantidad de constituyentes sea menor a la que había antes y que el proceso sea corto. En términos generales hay bastante consenso sobre los cambios necesarios. La posibilidad, por ejemplo, de que no exista una elección de constituyentes y que esto sea 100% armado por el Congreso, me parece que está claro que sería rechazada por la opinión pública.

-¿Crees que estos giros que ha tenido Boric son castigados por la opinión pública?

-Yo creo que han tenido efectos negativos sobre la imagen del presidente Boric. En la última medición, los atributos que más cayeron eran los aspectos personales del presidente. No hay mucho más margen para que el Presidente encuentre su estrategia definitiva. Y uno creería que eso ocurrió después del plebiscito. Pero creo que, de nuevo, la opinión pública valora mucho más a ese presidente de la segunda vuelta que el de la primera vuelta, que fue el que trató de gobernar al principio.