Juan Pablo Hermosilla intentaba liberar nuevamente a su hermano mayor de la prisión preventiva. Usaba para ello, desde la persecución política, el fin del estado de derecho, y la lectura de su propio currículum. Al lado Leonarda Villalobos esperaba el fin de su propio infierno. Encerrada en la cárcel común, en el penal para mujeres de San Miguel, convive con narcotraficantes y parricidas que la amenazan de muerte y, sobre todo, con la infernal falta de contrapuntos del reggaetón que tocan toda la noche.
Capitán Yáber no es un hotel, pero al menos tendría ahí acceso a reclusos acusados de crímenes parecidos a los suyos. Crímenes sin sangre, sin violencia probable que se basan en hacer liquido lo sólido, en convertir en personal, en familiar, la letra fría de la ley y todas sus trampas.
Nada de lo que se dijo ahí chocó a Leonarda Villalobos, solo le aburrió no poder ir más rápido a nombrar sociedades para que la operación quedara correctamente grabada en los audios con que dice pensaba protegerse cuando cayeran sospechas sobre ella. Las voces entonces como armas y Leonarda como la peor armada de los cowboys o mafiosos que aprontan a dispararse todos al mismo tiempo a ver quién sobrevive.
En Capitán Yáber no hay mujeres no por alguna consideración heteropatriarcal, sino porque las mujeres que cometen esos delitos, con la repercusión, con la audacia, con los caudales que implican, son inéditas en la historia de Chile. Leonarda inauguró un género, y debería por eso mismo premiada por “Comunidad Mujer” o por el SERNAMEG o por ambos organismos. Los crímenes de cuello y corbata, a partir de Leonarda, pueden ser también, de crímenes de blusa y rouge.
Leonarda, y su audacia e impericia, es lo único realmente nuevo en el Caso Audio. Cada cual ve lo que quiere ver, y no son pocos los columnistas que interpretan el casp como una prueba más de esta élite endogámica que le da la espalda a ese pueblo honesto y abusado que no tiene, ante la impotencia, más que salir a la calle y quemar semáforos de vez en cuando. Pero la historia de Leonarda es justamente lo contrario de la que estos columnistas quieren contar.
Leonarda no venía de los colegios de los que había que venir, menos de las universidades más reputada del país. Esto no le impidió hacer negocio con el abogado de la plaza mejor conectado: El inevitable Luis Hermosilla.
Este encuentro no es, sin embargo, fruto de un puro azar. El trabajo de Luis Hermosilla no consistía solo en alabar a los poderosos y pedirles favores o armar con ellos operaciones que consistían en tomar chocolate sin pagar lo que se debe. No, el verdadero trabajo de Luis Hermosilla era el de hacer de aduana social en un país que vivía, en este aspecto, una perpetua transformación. Su papel era hacer presentable familias y grupos económicos a los patios del poder. Cobraba por ello en dinero, pero también en más favores, o amistad. Una versión paródica de los ideales de su juventud comunista.
La funcionaria Villalobos conoció la angustia de perder la pega y la de seguir en ella. Vio cómo jovencitos cuicos del Frente Amplio la desplazaban a ella y a su marido. Cansada de esperar en la fila, cansada de haber empezado demasiado adulta a estudiar derecho en una universidad de poco prestigio, decidió que tenía que ir donde “las papas queman”. Dejar el prestigio del lamento, olvidar las promesas de la centro izquierda y negociar con grupos económicos, como ella, frágiles, arriesgados, despreciados, olvidados. Una factoría de primos o sobrinos de ricos de verdad, niños que no saben jugar con sus juguetes, zorrones envejecidos que se andan tropezando con la ley.
Hija de un Chile que invariablemente cambió la lógica de la hacienda, la de los apellidos vinosos o banqueros que no tuvo nada que ver con su tragedia. Voló con alas que no tenía y despertó como parte de un esquema de negocio que la sobrepasó completamente.
Su triste figura sin atributos, tiene que soportar horas y horas de chat con un exvicepresidente de la república, jueces, ministro de la corte, todo un país del que le tocaba hasta ahora ser espectadora, del que ahora es actriz de reparto, sin parlamentos ni escenas propias. Obligada a callar esperando que algún juez o corte se apiade de ella y la libere de escuchar toda la noche reggaetón.
Para seguir leyendo columnas de Ex-Ante, clic aquí.
Opinión | “Todo eso siempre lo supo todo el mundo. Que Luis Hermosilla ganaba los juicios en cualquier parte menos en los tribunales era algo que cualquiera sabía en las cortes”. Por (@rafaelgumucioa).https://t.co/LUVrVVnZPd
— Ex-Ante (@exantecl) August 24, 2024
El impacto de esta política puede ser simplemente desastroso, dejando centenares de carreras y miles de programas, así como la creación o fusión de carreras, al arbitrio de la fijación de precios en manos de algún burócrata estatal, y eliminando por completo la posibilidad de muchas universidades de realizar mejoras a la calidad sus programas […]
El pleno desestimó la solicitud de la defensa de Ángela Vivanco de inhabilitar a 6 jueces, aunque se aceptó la petición del juez Sergio Muñoz de no participar en la votación por formar parte de la misma acusación constitucional que el día anterior se votó contra él y Vivanco en la Cámara. El ambiente era de […]
Las diligencias realizadas este miércoles por la PDI en el Caso ProCultura —a una semana de las críticas a la ralentización de la investigación encabezada por el fiscal Patricio Cooper—, incluyeron el domicilio de Alberto Larraín, el siquiatra ex DC y con llegada al Frente Amplio (FA) que cofundó la entidad indagada en el marco […]
El péndulo condescendiente con el octubre chileno ha cambiado de sentido, abriendo una oportunidad no solo para ser absolutamente intolerantes con los que toleran la violencia, sino para proponer un proyecto político claro que dé cuenta de ese sentido común popular. La derecha tiene una oportunidad. Si no la toma, no solo dejará pasar el […]
En un ambiente tenso el pleno de la Corte Suprema comenzó a revisar la mañana de este jueves el proceso de remoción de la ministra Ángela Vivanco, a partir de presuntas irregularidades dadas a conocer en los chats que mantuvo entre marzo de 2018 y noviembre de 2023 con el abogado Luis Hermosilla, quien se […]