A las 7 am del 3 del marzo, la policía llegó al departamento de Providencia de la presidenta de la Cámara para incautar su teléfono en el marco de una investigación por tráfico de influencias. Allí estaba su suegra, que llamó a su pareja, el diputado De Rementería. La diputada tuvo a su hijo a las 04.33, dos horas y media antes de la llegada de la PDI a su departamento. La policía, al contrario de lo que se dio a entender, nunca entró al hospital.
Por qué importa. De la decisión que tome este jueves el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago sobre cuál fue la sucesión de eventos de la mañana del 3 de marzo en el departamento de la diputada PC Karol Cariola, dependerá si la fiscalía pueda o no utilizar la información del celular y notebook incautados a la presidenta de la Cámara, en el marco de una indagación por posible tráfico de influencias.
- La validez de esa diligencia, autorizada por la jueza Carla Capello, será vista este jueves por la mañana por el tribunal, luego de que el abogado Juan Carlos Manríquez, defensor de Cariola, pidiera declarar nulo el allanamiento al departamento de Providencia arrendado por la parlamentaria.
- Entre sus argumentos está que el informe policial presentado por el fiscal Patricio Cooper para autorizar la diligencia, basado en los chats entre Cariola y la exalcaldesa de Santiago Irací Hassler (a quien se había incautado previamente el teléfono en el marco del caso Sierra Bella), contendría “graves errores y omisiones”.
- Entre estos, que la solicitud de renovación de patente comercial que pidió Cariola a Hassler para el empresario chino Emilio Yang, fue rechazada por el Concejo.
- Al respecto, el exfiscal Carlos Gajardo dijo que la sola solicitud podía ser delito.
- Desde un primer momento, el gobierno inició una ofensiva política para cuestionar la diligencia realizada por la PDI, en la cual participó sobre todo la vocera de gobierno, Aisén Etcheverry. La estrategia fue centrar el caso en ese tema y relegar a un plano secundario las acusaciones de tráfico de influencia contra la diputada.
- Etcheverry apoyó los dichos de Cariola de que pretendía llevar el caso al Consejo Interamericano de Derechos Humanos. Ese organismo solo puede examinar casos después que se agoten todas las instancias judiciales dentro del país. Hasta ahora no se sabe de ninguna acción judicial contra la PDI presentada por su defensa.
- “Critican a Karol Cariola por defenderse, después de tener a su hijo Borja, mientras la atacan con saña. Que pretenden? Que no se defienda, renuncie a la presunción de inocencia y se rinda ante los insultos de la derecha?”, dijo el presidente Gabriel Boric.
Las dudas sobre la versión. A las 4:33 am del 3 de marzo nació el hijo de Cariola y el diputado PS Tomás de Rementería, en el hospital José Joaquín Aguirre de Independencia. A las 7 am, la policía ingresó al edificio de calle Suecia al llegar a Carmen Sylva, en Providencia, donde vivía la parlamentaria.
- El encuentro con la policía. “Mientras la abuela paterna del hijo recién nacido, junto con sus otros nietos, se preparaban para acudir al hospital, se encontraron con efectivos de la PDI en la puerta del domicilio de mi representada, que solicitaban entrar al departamento”, consignó el escrito de Manríquez.
- Cariola y De Rementería han acusado un sesgo en la elección del día y Manríquez ha dicho que hubo “violencia obstétrica”. El fiscal del caso señaló otra explicación.
- La explicación de Cooper. “En medio de análisis a los celulares de imputados del caso Sierra Bella surgió una información que nos motivó a pedir al tribunal una orden para poder incautar el celular y los dispositivos electrónicos de la diputada”, dijo el fiscal Patricio Cooper a La Tercera el 4 de marzo, al día siguiente de la diligencia.
- “Ese escrito se ingresó al tribunal el jueves y el viernes tuvimos el visto bueno del juzgado. Entonces, hubo un tema técnico por el cual la PDI no pudo ingresar el sábado y como se hace en todos los casos, este no es especial, se decidió monitorear el departamento de la imputada”.
- “Fue así como la policía ingresó a las 7:00 AM del lunes. Recién ahí se enteraron que la diputada no estaba en su hogar y se había trasladado a un centro asistencial”.
- La primera acusación. “Mi pareja y familia recibieron amenazas de ingresar incluso a mi sala de parto en el hospital donde me encontraba”, dijo Cariola en redes sociales el 9 de marzo. La diligencia de la policía comenzó a las 7am, dos horas y media después del parto. Además, nunca entraron al hospital.
- La denuncia de De Rementería. “Mi mamá es adulta mayor, estaba con mis dos hijos de tres y ocho años. Llegan y dicen que tienen que entrar y que, si no abren, van a entrar a la fuerza. Me da con un subcomisario de la PDI, que me dice que hay una orden. Le digo lo que está pasando, me voy con el traje quirúrgico puesto”, dijo el parlamentario a T13 Radio, el 10 de marzo. El hospital está a 25 minutos en automóvil del departamento en Providencia.
- “Se me informa que estaban buscando los elementos electrónicos de Karol, especialmente el teléfono (…), me dicen que tienen un carro en el hospital, ‘esto puede ser con escándalo’ y vamos a entrar a buscar el teléfono sino lo entregan voluntariamente”, aseguró el parlamentario.
- Fuentes de la PDI citadas por La Tercera dijeron que nunca hubo un vehículo esperando afuera del hospital. Lo que es indiscutido es que la policía jamás ingresó a ese recinto médico. No se conoce ningún registro de que un vehículo policial haya estado frente al hospital.
- La segunda denuncia. “Trataron de incautar el teléfono de mi hija de tres años, señalaban que el teléfono, al no tener chip o al no estar prendido, no podían prever que era de una niña. Le arrebatan el teléfono de las manos a mi hija”, dijo a T13.
- De acuerdo con fuentes policiales, dado que el celular de la hija del diputado estaba apagado, le pidieron cargarlo para comprobar que no fuera el de la parlamentaria. Una vez encendido, vieron que no era de Cariola y lo devolvieron, procedimiento normal en esos casos.
Ojo con. El defensor de Cariola informó este miércoles que la diputada dejará el departamento de Providencia, el cual arrendaba al empresario chino Hong Chen.