El hecho de que Trump entrara en negociaciones directas con los talibanes y llegara a un acuerdo sin invitar al gobierno afgano a sentarse en la mesa, desmoralizó a la ciudadanía, al gobierno, a las fuerzas armadas y a la policía. Biden decidió postergar el retiro de las tropas hasta el mes de agosto 2021 para asegurar una salida ordenada, pues en mayo no estaban dada las condiciones.
El acuerdo de Trump con los talibanes. En los libros de historia el mes de agosto de 2021 será recordado como la fecha en que los Talibanes tomaron el control total de Afganistán. Pero la verdadera fecha en la que la victoria de los Talibanes quedó asegurada es el 29 de febrero del 2020, el día en que Donald Trump firmó el “Acuerdo de Paz” con los Talibanes. Una vez firmado ese acuerdo el trágico colapso del que somos testigos era inevitable.
Un dilema para Biden. El hecho de que Estados Unidos entrara en negociaciones directas con los talibanes y llegara a un acuerdo sin invitar al gobierno afgano a sentarse en la mesa, desmoralizó a la ciudadanía, al gobierno, a las fuerzas armadas y a la policía, que veían como su propio gobierno estaba siendo pasado a llevar, sin poder opinar sobre las decisiones más trascendentales para el futuro del país.
Cambios desde el seno de la sociedad. Las víctimas del retiro de las tropas estadounidenses serán las mujeres y niñas afganas que habían recuperado sus derechos humanos básicos; más de la mitad del gobierno que desapareció estaba integrado por mujeres, casi el 30 por ciento de la fuerza laboral eran mujeres que habían recuperado el derecho a la educación, al trabajo y a su autodeterminación.
Parece más aconsejable que el gobierno separe su suerte del texto propuesto por la convención, adopte una prudente distancia y analice con pragmatismo “todos los escenarios”, ya que su obligación seguirá siendo gobernar el país y no defraudar las esperanzas de cambio que anidan en la sociedad chilena.
Si vamos a recaudar más, es un imperativo moral asegurar que esos recursos públicos se gasten bien. Para que el gobierno tome en serio el rol del Estado en su lucha contra la desigualdad, debe tener a la vista que los esfuerzos en gastar bien son tres veces más efectivos que los esfuerzos en recaudar […]
Para poder discernir cuándo estamos frente a propaganda y cuándo frente al ejercicio de la libertad de expresión, el Servel ha interpretado que en caso de que ésta se contrate o sea pagada, es propaganda, sino, libertad de expresión. A mi juicio es una interpretación bastante reducida.
Un informe internacional revela que los salarios reales en Chile aumentaron tanto en 2020 como en 2021. Sin embargo, el sueldo mínimo (medido en términos reales) cayó en 2021, debido a la inflación que ha impactado a toda la región.
Son muchos los motivos de desazón frente al proyecto de la Convención, pero el más inquietante es la plurinacionalidad, pues constituye el germen de la división de Chile. Es, además, un injerto tomado de la Constitución boliviana. Cómo las cosas no pasan casualmente, ahora se entiende el papel de Elisa Loncón, que anunció la refundación […]