Ministro Bellolio: “Vamos a custodiar el proceso constituyente frente a las amenazas y funas”

Al cumplir seis meses en el cargo este viernes y en vísperas de salir de vacaciones, el vocero dice que a fines del segundo trimestre habrá 9 millones de chilenos vacunados contra el Covid y explica por qué está optimista respecta del desempeño de Chile Vamos en las elecciones para la Convención constituyente y en las presidenciales. Sobre la irrupción de Paula Narváez sostiene: “Es una idea de continuidad de los gobiernos de Bachelet”.

—¿Cuáles son sus expectativas del último año de este gobierno?
—El año va a estar marcado por trimestres. El primer trimestre el foco estará en la pandemia y la vacunación. Ahí la ayuda de los alcaldes es fundamental. Así como se hizo el año pasado en una vacunación muy masiva y exitosa con la vacuna de influenza, esperamos que sea algo similar con la vacunación por Covid. Como es voluntaria, esperamos una muy alta participación, tendremos una campaña para que las personas se puedan vacunar y ya está arriba el calendario de vacunación de estas dos primeras semanas que lo que permite es que pueda estar todo bien programado.

 —Esta semana comenzaron a llegar las vacunas Sinovac, ¿cómo asegurar un buen control y organización del proceso de vacunación?
—Este viernes llegaron 2 millones de vacunas Sinovac, el domingo llegan otras 2 millones más y a partir de la próxima semana vamos a comenzar una vacunación masiva. Esperamos tener a fines de marzo 5 millones de personas vacunadas para luego el segundo trimestre ir con el resto de la población objetivo que son cerca de 9 millones de personas, y eso es una cuestión realmente gratificante y potente. Chile pudo asegurar 34 millones de dosis y eso es algo realmente importante.

—¿El legado del gobierno será el manejo de la pandemia?
—Los legados se construyen después de que los gobiernos terminan. Sin embargo, hay ciertos sellos, ciertas acciones concretas que uno hace. Nadie puede estar contento con la pandemia, pero en eso el Gobierno tuvo la decisión y la acción de anticiparse a ciertas medidas. Parte del legado va a ser haber extremado las medidas de cuidado para los chilenos en la pandemia del Covid.

—¿Cómo evalúa la propuesta del alcalde Lavín de decretar “zonas saturadas”? El exministro Mañalich apuntó a que sería una medida elitista.
—Cuando uno recibe propuestas tiene que evaluarlas en su justo mérito. Se ha hecho una evaluación por parte de la subsecretaría de turismo, por parte de Salud, subsecretaria de prevención del delito, y lo que ha demostrado es que la correlación entre permisos y contagios no es muy alta. De hecho, la modelación que hicieron en economía es que por cada 10 mil permisos, hay 33 contagiados. Lo que sí, hay insistir en las medidas de autocuidado y mayor fiscalización.

—¿Cuál será el desafío del segundo trimestre?
—Va a estar marcado por la convención constituyente: la instalación de esta. Nosotros como Gobierno no solo tenemos obligaciones constitucionales en el financiamiento, lugar donde operará, en la asesoría técnica, sino que también queremos custodiar y proteger el proceso constituyente frente a las amenazas y funas que algunos pretenden hacer en redes sociales y frente a las amenazas directas de querer rodearlas. Esas amenazas son amenazas a la democracia.

—¿Cree que el Palacio Pereira y Congreso de Santiago son lugares idóneos?
—El Palacio Pereira y el Congreso de Santiago son lugares simbólicos. No hay un lugar perfecto porque el problema no es el lugar, es la violencia que algunos amparan, defienden o silencian. El problema es aquellos que no creen en la democracia. Sin embargo, el ministro del Interior tiene planes específicos sobre la seguridad tanto de los convencionales como de los lugares donde deba producirse la deliberación.

—¿La centroderecha logrará superar el tercio de la convención?
—Tenemos una buena lista de constituyentes, el hecho de ir unidos significó complejidades, pero dada la magnitud e importancia que tiene la convención para empezar el desarrollo de un país justo eso es algo que se celebra. Estamos convencidos de que la mayor parte de los chilenos lo que quiere es que haya diálogo y acuerdos. Tenemos buenas expectativas y estamos convencidos que vamos a tener más de un tercio en esa elección.

—Y analizando el resto de los nombres de las nóminas que se presentaron, ¿prevé buenas posibilidades de entendimiento al interior de la Convención?
—Hay una centroderecha que lo que está buscando son esos espacios de encuentro, moderación, de recuperación y sanación de lo social, económico, político y sanitario. Chile Vamos está entusiasmado por un proyecto común, mientras vemos mucha división en la oposición. Pero hay un sector socialdemócrata con los cuales por supuesto que se pueden llegar a muy buenos acuerdos para Chile, y muchos independientes que hacen que se pueda generar una buena dinámica de conversación.

• PRESIDENCIALES Y PAULA NARVÁEZ:
  “ESTÁ CLARO QUE ES UNA IDEA DE CONTINUIDAD DE LOS GOBIERNOS DE MICHELLE BACHELET”

—¿Cuál será el foco del tercer trimestre, entre la elección de constituyentes y la presidencial?
—Si cumplimos con nuestra vacunación de toda la población objetivo, va a estar marcado por la recuperación económica y el trabajo. Uno de los efectos más duros para las personas de clase media fue haber perdido su empleo, su microempresa, sus inversiones. Ya se han recuperado más de 800 mil empleos, pero falta muchísimo camino. El último trimestre estará marcado por la elección presidencial, donde nosotros esperamos que haya un ánimo de moderación y diálogo. Porque al final, el año 2021 es el año de recuperar y sanar. Recuperarse y sanarse en lo social, en lo sanitario, en lo económico y en lo político.

—¿Debilita la proyección del bloque un gobierno de centroderecha con tan poca aprobación?
—No, nosotros entendemos que la aprobación ciudadana es una película y que no es una fotografía, y esa película todavía no ha terminado, creo que el sello de las acciones que como Gobierno vamos a hacer este último año, también va a ser refrendado por parte de la ciudadanía. Y nos sentimos súper orgullosos de que varios de los candidatos de Chile Vamos hayan sido ministros del actual gobierno o del anterior.

—Vienen 6 elecciones este año, ¿cómo las abordarán?
—Si, son muchas elecciones. La primera que nos tiene ocupados es la del 11 de Abril, queremos que en esa haya seguridad para cada uno de los votantes en lo sanitario como también en la seguridad personal y pública, estamos planteando como gobierno que pueda haber una votación adelantada el día anterior que podría significa que 3,2 millones de personas pudieran votar el día antes, dentro de los cuales están adultos mayores de sobre 75 años, personas con discapacidad, mujeres embarazadas, lo cual podría hacer que fuera también una votación mucho más segura y con menos tiempos de espera, dado que son 4 papeletas en simultáneo.

—Frente a los desafíos electorales de este año, ¿será difícil mantener la prescindencia?
—La prescindencia es algo que está regulado por la Contraloría. Por otra parte, mientras no haya un candidato de Chile Vamos, también va a haber prescindencia con respecto a esas candidaturas presidenciales.

—Esta semana Evelyn Matthei aseguró que ella y Joaquín Lavín competirán en las primarias de Chile Vamos, descartando que la UDI -su partido-, tuviera que elegir a uno. ¿Le parece a usted una buena fórmula llevar a dos cartas potentes y arriesgar una división de votos?
—Ambos son grandes candidatos, tengo el honor de haber votado por los dos, pero es algo que estrictamente tiene que resolver la UDI y ahí a mí no me corresponde pronunciarme al respecto.

—Y frente al escenario de la centroizquierda, ¿Cómo ve el auge de la exministra de su misma cartera, Paula Narváez?
—Es interesante, me tocó conocerla cuando ella era ministra y yo parlamentario. Está claro que ahí hay una idea de continuidad de los gobiernos de Michelle Bachelet. Pero de nuevo lo que vemos es que hay una izquierda social demócrata que quiere poner sus candidatos para no verse rendidos frente a la izquierda radical o la izquierda más populista, que lamentablemente está avanzando a pasos más rápidos.

—Se complicó el tema de pensiones tras la salida del exministro Ignacio Briones. El gobierno había impuesto el plazo de enero. ¿Fue duro para La Moneda ese ajuste? ¿Lamentan el timing resuelto por Evópoli?
—Ignacio Briones fue un gran Ministro de Hacienda, además un amigo, y legítimamente tomó una opción y esperamos que le vaya muy bien, así como también a los otros candidatos de Chile Vamos. Por otra parte, hay ciertos aspectos que son institucionales más que personales. Rodrigo Cerda, quien conoce al detalle cada rincón del ministerio de hacienda y tiene una extraordinaría capacidad también de diálogo. Entonces, más que una fecha, a nosotros nos interesa que salga ese acuerdo.

—¿Hay un nuevo plazo?
—Lo antes posible. Vemos una buena disposición en la senadora Goic, en el senador Letelier en poder llegar a ese acuerdo. Los ministros Delgado, Ossa y Cerda y la ministra Zaldivar, saben que esto es una prioridad para las personas y por lo tanto lo es para el gobierno. Si se aprobara hoy la reforma a las pensiones, más de 800.000 personas verían aumentada su pensión, eso es una urgencia ineludible.