En una entrevista radial, el líder de la CAM reivindicó los sabotajes, indicó que la confrontación con las forestales es la matriz del conflicto mapuche y que se “están creando las condiciones para una confrontación mayor a corto y largo plazo”.
Qué observar. En entrevista con Radio Universidad de Chile, el líder de la CAM, Héctor Llaitul, se refirió este domingo al ataque de un grupo de encapuchados a un fundo con protección policial en Carahue, Región de La Araucanía, que terminó el viernes pasado en un tiroteo con Carabineros en el cual murió uno de los atacantes, que en principio se informó que era Ernesto Llaitul Pezoa, hijo del líder de la CAM
- Llaitul aseguró la madrugada del sábado que el fallecido era Pablo Marchant, 25, otro miembro de la CAM.
- En el ataque quedó gravemente el trabajador Ceferino González, 67, baleado en el abdomen.
Qué dijo Llaitul. El líder de la CAM defendió los actos de sabotaje en La Araucanía y entregó su versión de los hechos.
- “Pablo Marchant tiene un impacto por atrás, en su cabeza, y al parecer tiene otro impacto en la parte de la cien, en su cabeza. Por lo tanto todo da cuenta de que esos tiros fueron hechos a corta distancia. Podemos suponer que fue ejecutado”.
- “Hay un registro que rápidamente fue bajado de un trabajador que dice que atraparon a uno de los waichafes. Ese registro ya no está en las redes, pero al parecer uno de esos trabajadores registró esa situación”.
- “Lo único que me queda claro es que hasta la 1.30 de la madrugada aproximadamente después de 6 o 7 horas (de lo ocurrido) ellos afirmaban categóricamente que se trataba de mi hijo y yo fui incluso al lugar de los hechos a reconocer el cuerpo. Lo pedí de forma muy honesta, humilde al fiscal y el fiscal incluso lo sostenía”.
- “El fiscal incluso me hizo entrar y me dio las condolencias. Estaban los jefes policiales ahí, estaba Investigaciones, estaba Carabineros cuando yo entré al lugar”.
- En la entrevista no fue consultado por el trabajador Ceferino González ni dónde se encuentra Ernesto Llaitul y el líder de la CAM no entregó más antecedentes para sostener su acusación.
Lo que hasta ahora se sabe. Cerca de las 6pm de este viernes 9, un grupo de encapuchados armados llegó en una camioneta al fundo Santa Ana, ubicado en la comuna de Carahue, Región de La Araucanía.
- Al bajar del vehículo comenzaron a quemar las máquinas del lugar, entre estas un skidder y un camión cisterna. También habrían amedrentado a trabajadores y herido al trabajador Ceferino González en la zona toráxica.
- El fundo contaba con protección policial, por lo que había carabineros de punto fijo en una caseta.
- Mientras aquello ocurría, llegó al lugar otro grupo de carabineros, con el propósito de ir a buscar a los trabajadores que terminaban su turno, en el marco de la medida de protección vigente.
- Los policías habrían sido recibidos a tiros por los encapuchados, y ellos habrían respondido a los disparos, generándose un enfrentamiento.
- Uno de estos tiros habría impactado en la cabeza a uno de los encapuchados.
- Los policías habrían alertado de la situación a sus mandos y no habrían tocado el cuerpo, que quedó en el suelo, todavía encapuchado, y con un arma larga a un costado. Hasta ese minuto la policía no habría conocido la identidad del fallecido.
- Dirigentes mapuche fueron quienes difundieron inicialmente que el muerto era el hijo del líder de la CAM. Esa versión fue recogida por las policías y el gobierno, que la dio por cierta.
- Fuentes del Ejecutivo transmitieron esa versión inicial a este medio.
- El viernes 9 por la noche se constituyó en el lugar el fiscal de turno con efectivos de la Policía de Investigaciones (PDI), para comenzar la indagación del hecho.
- De madrugada, Llaitul se constituyó en el lugar y no reconoció el cuerpo como de su hijo. Aseguró que el fallecido era Marchant.
Contrastes con convencionales mapuche. En su entrevista radial, Llaitul reivindicó los sabotajes, indicó que la confrontación con las forestales “es la matriz de fondo del conflicto” mapuche y que se “están creando las condiciones para una confrontación mayor a corto y largo plazo”.
- El líder de la CAM marcó diferencias con las posiciones de los convencionales mapuche.
- “La participación en la Convención Constituyente es reconocer de alguna forma al Estado hoy día tal cual es, un Estado capitalista, de formato colonial, que persiste en esta participación criminal de estos agentes del Estado, y estaríamos justificando que la acción de ajusticiamiento de los waichafes o de la muerte de nuestra gente por luchar por nuestra autonomía es legítima. Nosotros no estamos por esa vía”.
- “Estamos en un proceso distinto a lo que se entiende hoy día con esas aspiraciones de plurinacionalidad o de interculturalidad, que incluso le hacemos la crítica porque responden a una estrategia por parte del poder de cooptación de parte del movimiento mapuche hacia una esfera ya de derrota o de derrotero político, ideológico y cultural de la causa mapuche, toda vez que se reconoce al Estado como legítimo a través de la Constitución, de leyes, a través de participación en el parlamento, en la Convención, estamos reconociendo la legitimidad del Estado”.
- “Aquí hay dos realidades. Una que es a la que fue convocada gente que está en el movimiento mapuche también, y que pueden ser legítimas sus aspiraciones de conseguir vía institucional o a través de los mecanismos que le ofrece el Estado, participación o la integración. Pero también hay otra expresión del movimiento mapuche que es del movimiento mapuche autonomista y del movimiento autonomista revolucionario mapuche que estamos en otra cosa, que estamos en la reconstrucción de nuestro pueblo desde el terreno porque nunca por la vía institucional hemos logrado nada. Esa vía se agotó absolutamente ya hace décadas”.