Hasta ahora mucho se ha hablado del “pacto fiscal”, que no es más que una nueva reforma tributaria para aumentar la recaudación, en un momento macroecómico más que complicado, caracterizado por el bajo crecimiento, contracción económica y una alta inflación.
Cuando hablamos de la brecha de recaudación con respecto a los países de la OCDE, se menciona que con esta reforma se espera recaudar un 4% del PIB. Un número que a varios no les dice mucho, porque la realidad es que se puede vivir tranquilamente sin saber a cuánto dinero corresponde un 4% del PIB. Por lo demás para varios de quienes sí sabemos a cuánto dinero corresponde, nos puede parecer igualmente complicado dimensionar esa cifra.
Suponer que una reforma de estas proporciones no alterará las decisiones de inversión y ahorro de los diferentes agentes o para decirlo de manera algo más elegante que los agentes se mantendrán indiferentes frente a los cambios propuestos es, a mi parecer, algo ingenuo. Los datos de las reformas anteriores, que son muchas, dejan claro que las mismas no son neutras ya que por lo general los agentes tienden a modificar sus conductas ante cambios en las condiciones o reglas de juego.
Es decir, a veces es mejor hablar en simple para que las conclusiones sean más contundentes y claras. Se persigue un aumento de la recaudación del 20% en momentos en que se crean cada vez más empleos informales, la economía se contrae y la inflación supera por lejos la meta del Banco Central. No parece un win-win para todas las partes este 20% adicional que nos reclama el socio.
El ingreso de indicaciones al proyecto de reforma previsional marca avances en la negociación, con una cotización adicional del 7% y beneficios para 2,8 millones de personas. Sin embargo, el impacto fiscal y la informalidad laboral generan dudas, mientras el Consejo Fiscal Autónomo y Dipres analizan su viabilidad financiera.
El IPSA se mantuvo estable en una jornada marcada por menores volúmenes de transacción y un escenario internacional mixto, con datos positivos desde China y ajustes en el mercado de metales.
Parece especialmente inentendible la disminución al presupuesto destinado al Ministerio Público y al Poder Judicial que acaba de ser anunciada por el gobierno, cuando es ahora precisamente cuando debemos contar con procesos penales que se resuelvan con prontitud.
El Informe de Endeudamiento 2024 revela avances en los indicadores generales, con una caída del 16,6% en la deuda mediana y menor carga financiera. Sin embargo, el sobreendeudamiento sigue afectando a hogares de bajos ingresos, mientras el crédito informal y la morosidad en segmentos vulnerables aumentan la preocupación.
El IPSA sigue mostrando fortaleza, alcanzando nuevos máximos históricos, con un fuerte volumen liderado por Falabella y acciones relacionadas con materias primas. En el ámbito internacional, las cifras mixtas en ventas minoristas y resultados corporativos estadounidenses refuerzan la cautela en los mercados globales.