Al verlo, Vodanovic le dijo que no tenían maestro de ceremonias y que él encajaba perfecto para el papel, ya que es mucho más conocido por su profesión de actor que como rostro político. Vodanovic partió en seguida para la Biblioteca del Congreso y poco después arribó Goic. El momento en que más se notó que como se había improvisado su papel fue cuando empezó a leer los nombres de los presidentes de partido que había suscrito el acuerdo.
En vez de hacer una pausa después del primer nombre -para que la persona pasara adelante y firmara y se devolviera a su puesto- leyó inmediatamente el nombre del siguiente. Alertado de su error por dirigentes presentes, Goic se tomó con humor su desconocimiento del protocolo acordado: “Mira, el maestro de ceremonias”, comentó sonriendo.
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