64.000 documentos relacionados con el magnicidio de 1963 fueron dados a conocer esta semana por orden del gobierno de Estados Unidos. Si bien no hay revelaciones que provoquen un cambio importante de la historia, los informes dan cuenta de cómo trabajaba la CIA y cuentan algunos detalles sobre Lee Harvey Osawald, sindicado como el único asesino del Presidente.
Archivos desclasificados. Esta semana, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció la publicación de 80.000 páginas de documentos relacionados con el asesinato del Presidente John F. Kennedy ocurrido en Dallas el 22 de noviembre de 1963. Un hecho que ha desatado una serie de teorías conspirativas en los últimos 62 años.
- Finalmente, el martes en la noche salieron a la luz 64.000 de esos documentos, 16.000 menos de los que prometió el mandatario.
- La publicación consistió en 1.123 documentos PDF, incluyendo informes mecanografiados y notas manuscritas. La mayoría tiene menos de 10 páginas. Si bien Trump señaló que no habría censuras, parte de la información parece haber sido tachada.
- En muchos casos, los documentos están borrosos y son difíciles de leer debido a su antigüedad. Muchos de ellos, además, son fotocopias.
- Una ley de 1992 ordenó que los documentos relacionados con el asesinato se hicieran públicos en un plazo de 25 años, con pocas excepciones.
- Así, en 2023 ya se había revelado el 99% de los informes vinculados al magnicidio a lo que ahora se sumaron estos 64.000 registros.
- La Comisión Warren, establecida en 1963 para investigar el crimen, estableció que Lee Harvey Oswald -quien fue asesinado dos días después de la muerte de Kennedy- fue el único responsable del magnicidio.
Las atribuciones de la CIA. Si bien no hay grandes revelaciones en los archivos y no mostrarían contradicciones con el resultado de la Comisión Warren, para muchos historiadores y académicos existen algunos documentos muy interesantes.
- Por ejemplo, un resumen de un informe secreto de 693 páginas de la CIA de 1975, menciona casos en los que la agencia “pudo haber excedido su mandato”. Pero también se identifican jefes de estación, allanamientos en el extranjero, vigilancia ilegal y diversas operaciones “extremadamente sensibles”.
- De acuerdo con The New York Times, en lugar de revelar lo que el actual secretario de Salud, Robert F. Kennedy Jr., afirmó en su momento como “pruebas abrumadoras” de la implicación de la CIA en el asesinato de Kennedy, los archivos están llenos de detalles sobre los agentes e informantes de la repartición, sus acciones encubiertas y sus partidas presupuestarias.
- Así, existe un memorándum elaborado el 30 de junio de 1961 por Arthur Schlesinger jr., uno de los más cercanos colaboradores de Kennedy titulado “Reorganización de la CIA”. El informe fue realizado solo dos meses después de la fallida incursión estadounidense en Cuba.
- Allí se analiza la relación entre la CIA y el Departamento de Estado y se identifican problemas en la coordinación, supervisión y la posible falta de alineación de las operaciones de la CIA con la política exterior de EE.UU.
- Schlesinger señala que, si bien las actividades clandestinas de la CIA podrían ser necesarias, su naturaleza secreta y su potencial impacto en la política exterior requieren una supervisión adecuada por parte del Departamento de Estado.
- Otro memorando publicado enumera las diversas formas en que la CIA “excedió” sus atribuciones, incluyendo allanamientos al consulado francés en Washington, planes de ataques paramilitares contra instalaciones nucleares chinas e inyecciones de un “agente contaminante” en el azúcar cubana que se dirigía a la Unión Soviética.
- Según Tim Naftali, profesor de la Facultad de Asuntos Internacionales y Públicos de la Universidad de Columbia, lo que ha encontrado en los archivos lo convenció de que la información se había mantenido en secreto durante todas estas décadas, no porque incluyera información reveladora sobre el asesinato, sino para ocultar detalles altamente sensibles sobre la recopilación de inteligencia por parte de la CIA.
Oswald y el KGB. Una de las revelaciones que aparece tiene que ver con Lee Harvey Oswald, el hombre acusado de asesinar al Presidente Kennedy.
- De acuerdo con un documento fechado el 20 de noviembre de 1991, el oficial del KGB Nikonov confirma que “Oswald nunca fue un agente controlado por la KGB”.
- Según el informe, “Nikonov dudaba que alguien pudiera controlar a Oswald, pero señaló que el KGB lo vigilaba de cerca y constantemente mientras estuvo en la Unión Soviética”.
- Nikonov también añadió que Oswald tenía una relación conflictiva con su esposa soviética, y que los archivos del KGB indicaban que “Oswald era un mal tirador cuando intentó disparar al blanco en la URSS”.
Métodos de espionaje. Uno de los documentos detalla el uso del escaneo fluoroscópico, que utiliza rayos X para mostrar imágenes del interior de un objeto.
- La técnica se desarrolló para detectar micrófonos ocultos posiblemente utilizados para espiar las oficinas de la CIA.
- En otro documento, la CIA describe un sistema para etiquetar e identificar secretamente las cabinas telefónicas públicas intervenidas, utilizando una pintura solo visible bajo luz ultravioleta.
- El memorando fue conocido por uno de los nombres que aparece en él: James McCord, quien después se haría famoso como uno de los hombres que robaron el complejo Watergate, allanamiento que desencadenó el escándalo que terminó con la renuncia del presidente Richard Nixon en 1974.
“Conexión en Australia”. Entre los documentos desclasificados hay memorandos que hablan de una investigación de la CIA sobre la presencia de un presunto agente ruso en Australia.
- Un cable de la CIA enviado a Sydney en 1963 se refiere a una “conversación telefónica que incluyó… posible conexión del gobierno soviético con el asesinato [sic]”.
- El informe menciona a una persona de interés que llamó a la embajada de EE.UU. en Australia el 23 de noviembre de 1963, afirmando ser un conductor polaco de un vehículo ruso.
- “La información tocó varias áreas, incluida la posible conexión soviética que suministró dinero a individuos en Estados Unidos para asesinar al presidente”, señala un comentario en el documento.
“Daños colaterales”. Según The New York Times, la publicación sí ha traído varios “daños colaterales”. Si bien los documentos revelaron poco que cuestione los hechos conocidos sobre los asesinatos de John F. Kennedy, Robert F. Kennedy y el reverendo Dr. Martin Luther King Jr., este podría no ser el fin de las desclasificaciones.
- El miércoles, el Departamento de Justicia reveló registros de vigilancia del FBI relacionados con Martin Luther King -quien fue asesinado en abril de 1968-, a pesar de las objeciones de quienes temen que las revelaciones sobre la vida privada del líder de los derechos civiles se utilicen para manchar su legado.
- Otros también se están viendo afectados directamente por la publicación de los documentos: Entre los nuevos archivos publicados se encuentran registros contables que incluyen los números de Seguro Social de decenas de empleados del Congreso de fines de los 70.
- Algunas de estas personas aún viven, como Judy K. Barga, de 80 años, quien trabajó como contratista del gobierno y expresó su sorpresa al enterarse de que su información privada se había incluido en los archivos.
- Los académicos han señalado que tomaría tiempo revisar todos los documentos en busca de nuevas revelaciones. “Este archivo es mucho más impenetrable que todos los anteriores, con más anotaciones”, afirmó David J. Garrow, historiador con amplia experiencia en archivos de inteligencia.