Perfil: Juan Antonio Coloma, el último coronel de la UDI y su expectante rol como nuevo Presidente del Senado

Junto a Longueira, Chadwick y Novoa, Juan Antonio Coloma es de los llamados Coroneles de la UDI. Sólo él queda activo y con un cargo de suma importancia: presidente del Senado. Un político de la vieja escuela, que logró rejuvenecer a su partido, negociador nato, uno de los últimos representantes de la transición. Estas son algunas de sus historias, victorias y derrotas.

Una de las grandes influencias en la vocación política de Juan Antonio Coloma fue su abuelo, del mismo nombre, político conservador, que fue diputado y senador y que murió dramáticamente  el 28 de febrero de 1961. Como en una película de John Ford, falleció debido a un ataque cardíaco en plena campaña para ser reelecto en el Senado, por lo cual no se alcanzó a llenarse la vacante. De hecho, la papeleta de votación no pudo ser cambiada y recibió 7.240 votos de forma póstuma.

Esa sangre política corre por las venas de Juan Antonio Coloma, el último coronel de la UDI y recién elegido presidente del Senado. Descrito como un tipo pragmático, de convicciones inamovibles, pero a la vez abierto al diálogo, representa quizá uno de los modelos de la política chilena de la transición, capaz de transar, pese a su impronta conservadora, y de llegar a acuerdos con su adversarios.

El cerro. Durante la dictadura, tema que no le agrada tocar, fue dirigente universitario, presidente de la FEUC y estuvo entre los que subieron al cerro Chacarillas en 1977 a apoyar el régimen de Pinochet.

Coloma, que ingresó a la política bajo el influjo de Jaime Guzmán, es de esos dirigentes a la antigua que pueden dar vuelta una negociación. Suele citar a Arjona cuando le preguntan por la composición de una directiva o por cuáles son las características que tienen que tener los alcaldes o candidatos a diputado: “Una mezcla entre experiencia y juventud”, afirma sin contemplaciones.

Como muchos en la derecha, es un fanático declarado de Winston Churchill,. Entre sus particularidades está el no ser fan de tuiter. El último lo publicó el 7 de septiembre de 2022: “Banco Central en su Ipom de hoy nos acaba de decir que Inflación sigue subiendo y el próximo año tendremos crecimiento negativo y baja inversión .. hago un llamado urgente al Gobierno para que reenfoque sus prioridades y lidere un Plan para enfrentar este tremendo desafío”. De hecho, durante el 2022 apenas tuiteó 4 veces y retuiteó dos sobre dichos del Presidente de la UDI Javier Macaya.

El poder. Coloma es un poder que se mueve bajo las sombras. No es miembro de la directiva ni tampoco de la Comisión Política de la UDI. Pero su influencia se nota.

Jorge Alessandri, diputado de la UDI, dice que “la principal fortaleza es que es capaz de conversar y llegar a acuerdos sin que eso signifique renunciar a lo que cree. Además, al fijar como idea principal el fast track de seguridad, va a lograr que la agenda empiece a moverse en el senado”.

Respecto a la idea de ser el último coronel de la UDI, aclara: “Ha dedicado su vida al servicio público y ha servido a Chile desde distintos lugares. En la UDI es influyente desde su formación. Creo que tiene una gran gracia, y es que no representa a la vieja guardia. Cuando fue presidente logro que una generación de jóvenes llegara al parlamento (como Macaya y la Pepa Hoffmann).  Es de los pocos que, pese a ser senador, va constantemente a la cámara a conversar y fijar posturas o pedir opiniones”.

Los jóvenes. Una de las marcas de Coloma es el influjo que tuvo sobre la nueva generación de la UDI. Un dirigente  del partido recuerda: “A mí me tocó igual que a varios otros de mi generación, a la Pepa Hoffmann, Macaya y Bellolio, enfrentarnos a él en la interna de la UDI dos veces, por ahí por el 2008 y 2010. Cuando compitió contra Kast, a quien nosotros apoyábamos. Fue una lucha muy dura. Y en ese momento, nosotros no éramos muy cercanos a él y no teníamos demasiada relación con él. Estábamos en la lógica de renovar el partido. Pero han pasado los años, y la verdad es que Juan Antonio se ha transformado para nosotros en un político bien inspirador”, reconoce.

“Juan Antonio siempre está buscando una salida para poder llegar a un acuerdo. Pero al mismo tiempo tiene experiencia y no es dogmático; sino una persona con convicciones. Está dispuesto a conversar, pero no a que lo hagan gil ni a transar cosas que son importantes para sus ideas. Para la derecha fue una especie de garantía de que en una eventual conversación o negociación o acuerdo no va a ceder en todo”.

Un militante de la UDI agrega: “No tiene el nervio de estos políticos que les encanta firmar acuerdos para salir en una foto con las manos levantadas; y que con tal de eso entregan cualquier cosa. Juan Antonio no es así. Esa es una buena gracia que él tiene”.

El último coronel. Otro importante dirigente del partido señala. “Él es el único coronel activo. Todos los demás coroneles pasaron a la historia. Jovino murió. Longueira está retirado. Andrés Chadwick también está retirado. Entonces es el único que va quedando de esa generación. Y los más jóvenes lo estiman de verdad”.

Alesssandri insiste en la idea de no colocarlo en la vieja escuela del partido: “No calificaría a Coloma como de la vieja guardia. Como él dice en la vida hay que ser capaz de unir experiencia y juventud (el cuento de la amalgama que siempre repite). El momento más difícil para él sin duda fue el asesinato de Guzman. Marcó a una generación de la política chilena. De hecho en su discurso como Presidente del Senado fue lo primero que dijo”.

La vocación. Nacido en Santiago el 15 de julio de 1956, es un abogado y militante del partido Unión Demócrata Independiente (UDI), del cual fue su secretario general (1994-2001), vicepresidente (2002-2004) y presidente (2008-2012). Diputado desde 1990 hasta 2002, fue senador por el Maule entre 2002 y 2018.  Por el mismo cargo y la misma región, estará hasta 2026, siendo elegido Presidente del Senado desde el 15 de marzo de 2023.

Una persona que lo conoce desde niño, cuenta: “La verdad es que entró en el mundo político, no por una vocación especial, sino por un sentido del deber, cuando estaba en el colegio San Ignacio del Bosque. Ahí te inculcaban la preocupación por la pobreza”.

Guzmán. Ya en la Universidad Católica, conoció a la figura que sería clave en su decisión política. “Cuando entró a Derecho en la UC le cambió la mirada del país. Y ahí le influyó mucho Jaime Guzmán, profesor de derecho constitucional”, dice un amigo.

Lo que básicamente aprendió de Guzman era que Chile necesitaba de personas que se dedicaran a lo público, cualquiera fuera de la trinchera en que estuvieran. A algunos de sus más cercanos les ha comentado que formó un equipo, con Andrés Chadwick, de la misma clase. “Nunca he pensado que nací para esto, a pesar de que yo tengo familia política”, he reconocido.

Cuenta un ex compañero de la UC que “él sentía que el llamado era que uno tenía que ser actor y no espectador de las cosas que estaban pasando. Esa frase la repetía y la compartía. Eso marcó una época convulsionada. Recuerda que Juan tenía 17 años el 73”.

Estallido. Uno de los momentos más dramáticos que ha vivido como político es el Acuerdo del 15 de noviembre de 2019, que permitió el proceso constituyente para cambiar la constitución del 80, uno de cuyos ideólogos fue Jaime Guzmán. De hecho, una escena famosa es cuando se encontró en el baño con Gabriel Boric, y acordaron ciertos temas.

Quienes estuvieron con él en ese momento, recuerdan que fue un acuerdo dramático. Coloma estaba convencido de que había un peligro gigantesco de destruir la democracia. A sus conocidos les ha reconocido que  “fue un paso difícil, pero había que tomar una decisión”. De hecho, alguna gente de derecha le ha dicho que era mejor no haber tomado esa opción. “Va a quedar para la historia” suele decir.

El senador hoy se encuentra esperanzado en que el nuevo proceso constituyente sean una oportunidad de entenderse de mejor manera. Y a sus cercanos les ha dicho que espera, como Presidente del Senado, tener una relación fluida con el Presidente Boric.

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