Cerca de 40 minutos duró la reunión entre el director de Carabineros y Fabiola Campillai, quien quedó ciega al recibir una bomba lacrimógena en la cara -lanzada por miembros de la institución- cuando fue a esperar micro a un paradero en San Bernardo, durante las semanas posteriores al 18/10. La tardanza de los sumarios administrativos fue uno de los temas que marcó la conversación. El general Yañez buscó dar una señal dialogante y mostrar los cambios internos realizados desde las protestas, que tuvieron un alto costo en la imagen de la institución.
En qué fijarse: La reunión de este viernes 2 entre el general director de Carabineros Ricardo Yáñez y Fabiola Campillai fue solicitada por esta última.
- “Valoramos esta oportunidad de diálogo porque creemos que es el camino”, dijo el general en un video grabado tras el encuentro, que duró cerca de 40 minutos. “Fue una reunión privada, pero franca y sincera”.
- El encuentro era simbólico, ya que Fabiola Campillai se transformó en una de las víctimas más reconocibles del 18-O tras quedar ciega, al recibir una bomba lacrimógena en la cara cuando fue a esperar micro a un paradero en San Bernardo, comuna donde vive, el 29 de noviembre de 2019. La reunión fue solicitada por ella a través del diputado del distrito Leonardo Soto (PS) y aceptada rápidamente por el general, quien asumió el 19 de noviembre de 2020.
- La cita ocurrió en un momento en que Carabineros busca dar señales de cambios que se han reflejado en sondeos. En la encuesta de abril del Centro de Estudios Públicos (CEP), un 30% de los entrevistados la consideraba una institución confiable, una mejora respecto de diciembre de 2019, cuando un 17% fue de esta opinión, pero lejos del 57% que confiaba en Carabineros en agosto de 2015.
- El encuentro del general Yáñez ocurrió también luego de que en junio se terminaran de elaborar los nuevos protocolos para que Carabineros actúe frente a manifestaciones. Para la elaboración de estos se recibieron los aportes del Instituto de Derechos Humanos (INDH), la subsecretaría para los Derechos Humanos y la subsecretaría de la Niñez, los cuales fueron transmitidos en reuniones con Carabineros y la Subsecretaría del Interior.
- En estos se distingue entre marchas y desmanes, y se establece que la policía uniformada acompañará las marchas, independientemente de si fueron autorizadas o no. La actitud adoptada por la policía y el gobierno para las convocatorias del domingo 4 previo al debut de la convención constitucional, está acorde con estas nuevas disposiciones, aunque todavía no hayan sido oficializadas, explican conocedores del proceso.
- La reunión del general Yáñez ocurrió también en medio de una caída sostenida en las postulaciones a la escuela de suboficiales desde 2015 y a la escuela de oficiales desde 2018.
La reunión: Fabiola Campillai llegó al mediodía a la oficina del general Yáñez, en el tercer piso del edificio institucional del centro de Santiago, acompañada por el diputado Soto, su abogada Alejandra Arriaza y su marido. Asistentes a la reunión cuentan que el general la saludó con el brazo, ya que en pandemia no se puede dar la mano. Describen el encuentro, que se extendió por cerca de 40 minutos, como tenso.
- En la oficina del general había un camarógrafo y fotógrafo institucional, los que salieron luego de que Campillai pidiera que la reunión fuera privada. El general quedó acompañado entonces por la generala Karina Sosa, directora del área de Derechos Humanos, un asesor jurídico y el ayudante del general.
- Entonces tomó la palabra el diputado, quien planteó la situación administrativa de los 2 capitanes imputados en la causa, a un año y medio de los hechos, y una campaña de recolección de dinero para estos, en que se usó el logo institucional.
- Los presentes afirman que el general tomó entonces la palabra y dijo empatizar con el dolor de ella y otros que habían sufrido. “No nos pidió perdón”, dijo Campillai tras la cita.
- También explicó que a ambos capitanes se les había instruido solicitar el retiro temporal de la institución, mientras se resolvían todas las instancias del sumario interno. Esta figura implica que no están trabajando en Carabineros ni percibiendo sueldo, explican fuentes de la policía.
- En la arista penal que corre paralelamente, el capitán Patricio Maturana está formalizado por apremios ilegítimos, con resultado de lesiones graves a gravísimas y se encuentra con arresto domiciliario total. El capitán Jaime Fernández, quien portaba ese día una cámara Go Pro y a quien los querellantes atribuyen participación, no está formalizado.
- Respecto de la campaña de recolección de fondos para los imputados, Yáñez dijo que ésta había sido organizada por civiles y que habían presentado una denuncia en la fiscalía de Valparaíso por el uso del logo institucional.
- Las fuentes consultadas afirman que Yáñez destacó que el 99% de los funcionarios eran personas buenas y que no se podía enjuiciar a una institución por la acción de unos pocos. Estas fuentes añaden que dijo que el proyecto de reforma a Carabineros podía mejorar los problemas en la formación que podían incidir en las acciones de algunos.
- También habría reiterado algunas de las cifras dadas en su cuenta pública esta semana. Esto es que las intervenciones de Control de Orden Público realizadas entre el 18 de octubre de 2019 y el 31 de marzo de 2020 derivaron en 1.493 procesos administrativos. También que se expulsó a 21 carabineros, hubo 18 propuestas de expulsión, además de 156 sanciones.
- Presentes en la cita sostienen que Campillai replicó enérgicamente que lo que había ocurrido no eran faltas al protocolo ni hechos aislados, sino que delitos. Añaden que pidió una respuesta más activa de la institución.
- Asistentes a la reunión cuentan que el general explicó que él siempre había dicho que estaba dispuesto a recibir a víctimas del 18-O, pero que no había promovido estas iniciativas siguiendo una recomendación del director del Instituto Nacional de Derechos Humanos, Sergio Micco, quien le habría transmitido que tomar la iniciativa y convocar a reuniones podía ser malinterpretado.
- La cita terminó sin compromisos concretos ni promesas de volver a reunirse. “Creo que esta reunión, desde el punto de vista simbólico, fue muy importante”, dijo Soto tras dejar el edificio.
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