Guasón 2: Folie à Deux: ¿Qué te pasó Todd Phillips?

Por Ana Josefa Silva, crítica de cine
Joker II (DC Studios)

Si lo que pretendía Philips era hacer una introspección, digamos, una mirada íntima a la locura del personaje, solo consiguió un relato claustrofóbico y monocorde, carente de los matices que uno espera de un análisis de este orden.


La muy esperada segunda parte de El Joker (o El Guasón) carece de la vitalidad y provocación de la película que la antecedió. Pretende escarbar en la intimidad del personaje, sin conseguirlo, mientras se desliza por una planicie claustrofóbica en un mix de géneros que no acaba de encajar.

  • Por supuesto ustedes pueden opinar de manera totalmente opuesta a la mía, de manera que, si tienen curiosidad ¡vayan a verla (ojo: ojalá en Imax)! Porque no es verdad que la curiosidad mató al gato: es lo que nos mueve y nos hace crecer.

Bonus Track. Recomendaciones en streaming.

Guasón 2: Folie À Deux

De qué va. Tras la primera película (2019), Arthur Fleck/Guasón/Jocker (Joaquin Phoenix) lleva dos años encerrado en Arkham -Psiquiátrico-prisión de Ciudad Gótica- en el área de mayor seguridad. Espera el juicio por los homicidios que cometió y que de seguro lo conducirán a la pena de muerte. Cuando sube al área más “abierta” conoce a Lee/Harleen Quinzel (Lady Gaga), una fan, como lo son también algunos de sus carceleros y mucha gente allá afuera.

 

Una mezcla de musical, género carcelario y película de juicio.

Guasón 2: Folie À Deux tiene partida de caballo de carrera: como introducción/resumen de lo acaecido anteriormente, en una secuencia de animación de aquellas de antiguo cuño, se nos representa la sangrienta acción de Fleck en directo por TV, mientras vemos su desesperada lucha interna entre sus dos personalidades —Fleck y el Joker— que terminan separándose, logrando imponerse el Jocker.

De allí al tenebroso Arkham.

Sus realizadores han eludido decir que la película es, en parte, un musical: pueden hacerlo porque lo es y no. Hay varios números musicales, pero son breves y a decir verdad es lo más logrado de la película. Incluso le aportan (en ciertos momentos) esa vitalidad de la que carece este filme que no quisiera tildar de tedioso. Hay guiños a “Sweet Charity”, canciones de Sony & Cher, Burt Bacharach, Bee Gees, Billy Joel.

La producción es apabullante: escenarios puntillosamente elaborados, atmósferas muy logradas (deprimentes y claustrofóbicas), encuadres perfectos, planos muy bien pensados.

¿Para qué?

Para deslizarnos por una narración repetitiva.

Me encantaría saber qué pasó en la interna en la discusión del guion (mismo de la primera película y que también incluye al director). No solo hay errores gruesos de “continuidad” (llamémoslo así siendo generosos) sino de conceptos elementales (¿qué es ese psiquiatra en el estrado negando la psicopatía de Artur Fleck para enseguida describir lo que cualquiera sabe aquello que la define?).

¿Estamos en Ciudad Gótica o en Nueva York? ¿A qué hora y porqué al guionista se le ocurrió lanzar una bomba sobre el juzgado? ¿quién, para qué?

Podrían ser detalles si no fueran tan gruesos.

En todo caso, no es lo más importante.

Los tropezones del relato son tan evidentes que el espectador observará varias secuencias e inevitablemente pensará: ¿ahora qué? ¿hay cómo salir (dignamente) de este pie forzado? Fleck/Guasón es un personaje con sus facultades mentales perturbadas, pero aún desde allí sus acciones han de tener una coherencia o una razón (¿sinrazón?) de ser.

Luego viene la pregunta ¿y cómo lo liquidamos? La respuesta es parte de las arbitrariedades del relato.

¿Todo mal?

¡No! Los números musicales son extraordinarios y la banda sonora es de lujo. Lady GaGa juega asombrosamente con su voz para no desencajar con Joaquin Phoenix, que se defiende muy bien (es entonado y no importa que carezca de fuerza vocal porque lo reemplaza con fraseo).

Y aún en esta suerte de planicie de relato, ni muy coherente ni muy asombroso, ambos despliegan un gran talento actoral.

Si lo que pretendía Philips era hacer una introspección, digamos, una mirada íntima a la locura del personaje, solo consiguió un relato claustrofóbico y monocorde, carente de los matices que uno espera de un análisis de este orden.

Y en la que sería la segunda parte, que transcurre en el Juzgado de Nueva York (?), es que ya definitivamente la película se empantana. Posiblemente porque el personaje mejor desarrollado y con mayor arco dramático es el de Lee (Lady Gaga). Aunque es aquí cuando de pronto (no sabemos bien porqué ni cómo) Arthur Fleck “despierta” de esa suerte de letargo con el que ha transitado durante casi todo el filme. Pero eso será por un rato.

Joker: Folie A Deux

  • Dirección: Todd Phillips

  • Guion: Scott Silver, Todd Phillips

  • EE.UU., 2024

  • Duración:138 min.

En streaming

Lobos

  • En AppleTV Plus

El trailer dice mucho de esta divertida comedia de acción: su ambiente, sus personajes. Incluso pareciera que se pasara de roscas y contuviera spoilers.

 

Pero no. En realidad, allí está la perfecta síntesis y si nos muestra algo sorprendente, es solo el comienzo: Jack (George Clooney) y Nick (Brad Pitt) convocados a una elegante suite de un hotel por una distinguida y muy nerviosa mujer (ya sabremos de quien se trata) para solucionar un problemilla. En realidad, ella solo ha llamado a Jack, pero Nick aparece porque alguien más lo convocó.

El tema es llevarse el cuerpo de un chico que accidentalmente se ha estrellado contra una mesa de cristal y ni la mujer ni el hotel quieren que alguien siquiera se entere.

Jack y Nick —que se dedican a lo mismo (hasta repiten las mismas frases/consignas)— se repelen. Este es un trabajo que se hace ¡solo!
Pero no hay más remedio.

Los líos recién comienzan cuando, ya instalado el cuerpo de Kid (Austin Abrams) en el maletero del auto de Jack, el chico “despierta”. Literal: “no estaba muerto, andaba de parranda”. En realidad, había probado una droga ¡muy estimulante!, parte de un cargamento que sí que transforma el “trámite” de los “arregladores” en un potencial conflicto de proporciones.

Lobos , que transcurre durante una noche nevada en Nueva York, en época navideña (a juzgar por el decorado) tiene muchos e insospechados giros. Incluso hasta que amanece, que eso es al final del filme.

En el intertanto, el trío va de una zona a otra de Nueva York, para resolver el problema cuyo origen solo pueden especular. Así entran y salen personajes muy singulares que conducen la historia por derroteros insospechados.

Coproducida por George Clooney y Brad Pitt.

¡Muy entretenida!

Wolfs

  • Dirección y guion: Jon Watts

  • EE.UU., 2024

  • Duración: 1 hora 45 min.

Desafiantes

  • Prime Video

Las pulsiones más básicas del ser humano: el erotismo, el vértigo del éxito, el deseo, se entrecruzan en esta historia que tiene a Zendaya   en el rol de su vida.

 

Ella es Tashi, una joven tenista que arrasa en el campo de juego: una verdadera fuerza de la naturaleza que no solo proviene de su talento sino de su claridad meridiana de propósitos. Aunque no desconoce su vulnerabilidad, nada la derrota.

Desde las graderías, la contemplan embobados dos jóvenes tenistas muy amigos, que ella luego se llevará por delante, como todo: Art (Mike Faist) y Patrick (Josh O’Connor). Un trío que gira en torno al tenis, como un exigente proyecto de vida que está por sobre todo lo demás.

La película va y viene del presente al pasado cercano, luego al más lejano, para situarnos finalmente en un campeonato que pronto entendemos  que es de vida y muerte.

Tashi es, en ese momento de la historia, la ex tenista prodigio convertida en entrenadora. Se ha casado con Art, que ha conseguido ser campeón pero que pasa por un periodo de juegos perdidos. Ella tiene una estrategia para la redención de su marido, la que da un giro insospechado cuando Art debe enfrentarse a Patrick, su antiguo mejor amigo y ex novio de Tashi, un jugador en franco declive.

A medida que sus pasados y presentes chocan y las tensiones se disparan, Tashi debe preguntarse cuál es el costo de ganar.

En este intenso juego de poderes se mezclan el honor, el romance, el sexo y un pasado no tan olvidado.

Challengers

  • Dirección: Luca Guadagnino

  • Guion: Justin Kuritzkes

  • EE.UU., 2024

  • Duración: 2 horas 10 min.

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