Cambios en la institucionalidad económica estadounidense y por qué importan para Chile. Por Kevin Cowan

Economista y académico de la Escuela de Negocios de la UAI

 Los cambios recientes en la gobernanza económica estadounidense y las amenazas a la independencia de la FED podrían tener consecuencias estructurales sobre el rol global del dólar.


En pocos meses, la administración de Donald Trump ha generado cambios significativos en la institucionalidad económica de Estados Unidos, con consecuencias no solo para ese país, sino también para el resto del mundo.

Comencemos por la fijación de aranceles. La estabilidad y previsibilidad de los aranceles es clave para que las empresas puedan evaluar y concretar decisiones de comercio exterior y de inversión. Idealmente, los aranceles deben ser bajos, aprobados por el Congreso, en el marco de acuerdos comerciales y con mecanismos claros de resolución de controversias como los ofrecidos en su momento por la OMC o por los propios acuerdos.

Si bien la Constitución estadounidense otorga al Congreso la potestad de fijar aranceles, se han establecido excepciones que permiten al Ejecutivo intervenir en situaciones excepcionales, como conflictos armados o amenazas a la seguridad nacional. En lo reciente, sin embargo, estas facultades han sido utilizadas con una frecuencia y amplitud sin precedentes, y sin clara vinculación con las situaciones de excepción. Esto ha generado una elevada volatilidad y creciente incertidumbre respecto a la política arancelaria futura: no está claro cuál será el nivel final de las tarifas, su fecha de vigencia, ni los criterios para definirlas.

¿Importa este cambio? Sin duda. Más allá de los efectos de aranceles que se terminen aplicando, la incertidumbre por sí sola puede generar una significativa postergación de inversiones, afectando negativamente la actividad tanto en EE.UU. como en otras economías.

El segundo ámbito de transformación es la regulación y supervisión financiera. Numerosos países (incluyendo Chile) han delegado estas funciones a agencias técnicas e independientes, bajo la premisa de que una supervisión consistente, basada en criterios profesionales, genera beneficios sostenidos en el largo plazo. La autonomía es esencial para evitar que costos políticos de corto plazo desincentiven la adopción de medidas necesarias, pero potencialmente impopulares. Además, busca resguardar el ejercicio de funciones críticas —como la emisión de normativas, la entrega de licencias o la imposición de sanciones— del uso partidista o discrecional, asegurando que dichas atribuciones se ejerzan exclusivamente con criterios de estabilidad y eficiencia del sistema financiero.

En Estados Unidos, las instituciones autónomas más relevantes son la Reserva Federal (el banco central y supervisor de los mayores bancos), la SEC (el supervisor de valores), el CFTC (el supervisor de derivados) y la FDIC (la entidad de garantía de depósitos).

Los gobiernos de turno siempre han tenido cierto grado de influencia en estas entidades mediante la nominación de autoridades. No obstante, dos eventos recientes sugieren que la administración actual podría tener una mayor injerencia. En primer lugar, está el despido de comisionados de la Federal Trade Commission antes de completar sus mandatos. De ser ratificados por los tribunales, estos despidos podrían abrir la puerta a la destitución de autoridades en alguna de las agencias financieras clave.

De hecho, ya se ha producido la remoción de miembros del directorio en la NCUA, el ente supervisor de cooperativas de ahorro y crédito. En segundo lugar, una orden ejecutiva emitida en febrero obliga a las agencias supervisoras a obtener aprobación previa de la Casa Blanca para sus planes regulatorios, bajo amenaza de recortes presupuestarios. Esta orden incluye a la Reserva Federal, aunque su aplicabilidad es incierta debido a su independencia financiera.

¿Por qué esto importa para Chile?

  • En primer término, por el rol sistémico de EE.UU. en los mercados financieros globales. Cambios en su marco regulatorio y de supervisión tienen efectos de primer orden tanto a nivel doméstico como internacional. Un ejemplo es lo que ocurrió con la flexibilización que precedió la crisis bancaria regional en EE.UU. en 2023, que incluyó la caída de Silicon Valley Bank y desencadenó efectos globales.
  • Segundo, los criterios regulatorios adoptados por EE.UU. pueden influir sobre los estándares definidos por organismos internacionales como el Comité de Basilea y IOSCO (la entidad que agrupa los supervisores de valores).
  • Tercero, al igual que en el comercio, es importante que los actores financieros que interactúan con el mercado estadounidense lo hagan en un marco de reglas claras, estables y aplicadas bajo criterios técnicos.

Una dimensión adicional es la autonomía de la Reserva Federal. En los últimos días, el presidente Trump ha intensificado sus críticas hacia su presidente, Jerome Powell, llegando incluso a insinuar su remoción. Powell ha respondido que la ley —a través del Federal Reserve Act— y la jurisprudencia desde 1935 impiden su destitución por motivos políticos, visión respaldada por algunos miembros de la Corte Suprema. Sin embargo, el hecho de que este debate se esté dando públicamente ya representa un quiebre con prácticas institucionales.

El sólo deterioro en la percepción de independencia de la FED puede afectar su credibilidad en la conducción de la política monetaria y reducir su capacidad para controlar la inflación sin comprometer el crecimiento.

¿Y por qué debiese importarnos?

Porque una FED menos creíble implica mayor inflación o menor crecimiento en EE. UU., amplificando los efectos contractivos que ya van a tener los mayores aranceles y la menor inversión.

Una reflexión final sobre el dólar. La moneda estadounidense juega un rol central en la economía internacional. Ha llegado a este puesto de primacía por el tamaño de la economía norteamericana y su relevancia comercial, y también por la credibilidad de su política monetaria y su institucionalidad financiera.

Esa confianza se basa, en buena medida, en la autonomía de la Reserva Federal y en la acción coordinada de los entes reguladores para resguardar el funcionamiento estable del sistema financiero. Los cambios recientes en la gobernanza económica estadounidense y las amenazas a la independencia de la FED podrían tener consecuencias estructurales sobre dicho rol global del dólar.

Para más contenido After Office, haz clic aquí

 

Publicaciones relacionadas

Profesor MBA para la Industria Minera. Ingeniería Industrial, U Chile, socio de CIS Consultores

Mayo 17, 2025

¿Chile esquizofrénico? Por Marcos Lima

En un ambiente preelectoral, entender y sobre todo dimensionar adecuadamente los verdaderos problemas que el país enfrenta es fundamental. Si no hacemos un buen diagnóstico, nunca encontraremos la solución.

Ex-Ante

Mayo 17, 2025

El Frente Amplio, la degradación de la democracia y la ultraderecha. Por Kenneth Bunker

Comité Central del Frente Amplio en noviembre de 2024. Foto: Agencia UNO.

Es precisamente por cosas como la seducción del ofertón electoral y la capacidad para doblar verdades a conveniencia que las personas desaprueban tanto al Presidente como al gobierno, en números récord. Pues quienes se presentaron como defensores de la democracia, no han traído más que degradación institucional.

Director Instituto de Políticas Económicas de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad Andrés Bello

Mayo 17, 2025

La urgencia fiscal de Chile. Por Nicolás Garrido

El próximo gobierno heredará no sólo las cifras fiscales, sino también el desafío político de construir un nuevo pacto: uno que permita crecer para redistribuir, y no redistribuir lo que no se genera. Como advierte Acemoglu en uno de sus textos más incisivos: “El fracaso en resolver los problemas del presente no sólo perpetúa la […]

Crítica de cine

Mayo 16, 2025

Dos series españolas ¡de infarto! y una película para cinéfilos. Por Ana Josefa Silva

José Coronado y Maribel Verdú se lucen en dos dramas/thrillers, uno policial y el otro político/familiar.

Ex-Ante

Mayo 16, 2025

Cómo el Frente Amplio pasó del discurso ético a encubrir la corrupción. Por Jorge Schaulsohn

Con sus denuncias ficticias de “espionaje”, y la ofensiva contra el fiscal y la prensa, el Frente Amplio ha adoptado un modus operandi digno de grupos y gobiernos totalitarios, además de emular a Donald Trump. A eso suma la contradicción de haber llegado al poder predicando una “ética superior”.