Analista militar Marcelo Masalleras: “Israel no cuenta con la fuerza para ocupar Gaza durante mucho tiempo”

Marcelo Masalleras, investigador senior de AthenaLab, especializado en temas de defensa, seguridad y relaciones internacionales, analiza las dificultades de una invasión terrestre israelí a Gaza, las acusaciones de Siria sobre un ataque de Israel a sus aeropuertos y el nuevo escenario que se abre en el conflicto en Medio Oriente. Masalleras es coronel (R) del Ejército y profesor en la Academia Militar de West Point de Estados Unidos y en la Academia de Guerra del Ejército de Chile. Tiene un master en Seguridad Internacional en la Universidad de Georgetown.

-¿Qué significa para el conflicto en Medio Oriente la reciente acusación de Siria sobre un ataque israelí a los aeropuertos de Damasco y Alepo?

-No es una estrategia nueva. Fundamentalmente es para adelantarse e impedir el suministro de pertrechos, especialmente armas, que están fluyendo desde Irán hacia Siria y el Líbano, donde está situado Hezbolá. Hezbolá tiene una cantidad importante de combatientes, aparentemente mejor entrenados que los de Hamas, en mayor número, y representan una amenaza militar permanente para Israel. Ha habido antecedentes de miembros de las fuerzas armadas de Irán en los últimos días en Siria, aparentemente, desplegando el flujo logístico. Por lo tanto, no es ni nuevo ni tampoco ilógico pensar que acciones como esta se enmarquen justamente en el intento israelí de detener el refuerzo de armamento.

-¿Consideras que esto era predecible, entonces?

-No sé si predecible, pero es parte de lo que Israel ha hecho anteriormente, así como está bombardeando Gaza, que lo ha hecho durante años, y como ha abatido objetivos en el sur del Líbano, donde se prevé que están las fuerzas de Hezbolá, también lo ha hecho en territorio sirio. Si existe un involucramiento de Irán en los últimos acontecimientos, es lógico que Israel, dentro de las operaciones de configuración del escenario que le permitan mayor libertad de acción, mayor seguridad en las operaciones, haga y ejecute este tipo de ataques.

-Este ataque, según las informaciones de las agencias internacionales, ocurre un día antes de una visita que iba a hacer el canciller de Irán a Damasco ¿Crees que lo que está pasando puede extender el conflicto a otros países de la región?

-Es una de las grandes interrogantes. La mayor parte de los análisis internacionales prevén y visualizan el gran riesgo de que esta nueva fase del conflicto entre Israel y Hamas tiene el potencial de extenderse a otros estados, o bien afectar procesos como regularización y normalización de relaciones con otros estados. Arabia Saudita ya estaba en un proceso de normalización de relaciones bastante avanzado por lo que se había escuchado tanto al príncipe heredero como al primer ministro israelí, y que no era bien visto por Irán, porque es un competidor dentro del Golfo. Hay un tema de tensión estratégica entre ambos estados. No olvidar que hay intereses en juego bastante mayores que los de Hamas. Irán es un factor determinante en lo que va a suceder de aquí en adelante.

-¿Una guerra entre Irán e Israel es más o menos inevitable en el futuro, ya que son los verdaderos contendores?

-No me atrevería a decir algo así, pero sí que son dos estados que están en conflicto y que eventualmente podría escalar el conflicto a una situación más delicada. Y la reacción de Israel respecto de Irán también es algo que a lo mejor no en el corto plazo, pero si en el mediano y largo plazo va a tener mucha tensión. Son competidores, en términos religiosos. Irán no acepta la existencia del estado de Israel y de hecho financia a los dos principales grupos terroristas que están hoy día afectando a Israel, Hezbolá y Hamas.

De que están en conflicto y en algún momento se van a golpear es factible. Pero no hay que olvidar que Israel se presume que es una potencia nuclear, es la única que hay en la región e Irán sigue persiguiendo la posibilidad de ser una potencia nuclear. Israel está siempre con un ojo puesto en la capacidad iraní de enriquecimiento de uranio, porque una vez que logre esa capacidad va a cambiar el equilibrio estratégico de la región.

-En términos militares, ¿qué es lo qué esperas del conflicto entre Israel y Hamas en Gaza? ¿Cómo se debería desarrollar eso?

-Es tremendamente complejo y en una zona reducida de un poco más de 360 kilómetros cuadrados y densamente poblada. Por lo tanto, cualquier operación debe considerar que se van a tener que meter en la ciudad. Una operación militar que involucre ingresar a una localidad es compleja, porque se confunde la población civil con los militares. Es muy difícil distinguir enemigo de no enemigo. La infraestructura, obviamente donde se protegen los terroristas, también es infraestructura social. Uno de los grandes potenciales que tiene Israel en su ejército son sus unidades blindadas. La movilidad y el combate lejano, que es una de las capacidades de las unidades blindadas, se ve totalmente anulado en una zona urbana.

-¿Cómo incide en la decisión de invadir?

-Cualquier incursión que se haga, sin duda, no puede permanecer mucho tiempo, porque Israel no cuenta con la fuerza suficiente para ocupar Gaza completamente por un tiempo prolongado. Segundo, deberá ser intensa, pero con la intención de buscar los objetivos que pretenden, rescatar a los rehenes, detener y destruir al mando y a toda la estructura superior de Hamas. Mantenerse va a ser un tremendo problema y con un alto costo en vidas civiles y vidas militares.

-Cuando dices un alto costo en vidas civiles y militares, ¿de qué estamos hablando?

-Estamos hablando de que el combate o entrar en las ciudades es muy complejo para los militares y son fácilmente víctimas de emboscadas. Por lo tanto, las fuerzas terrestres de Israel van a tener una atención relevante. Y el mismo combate, necesariamente, inevitablemente, va a cargar con la vida de civiles en Palestina. Porque quienes transforman en objetivos militares a los civiles, en muchos casos, son los terroristas que ocupan la infraestructura de los civiles y la convierten en un blanco militar.

-Estados Unidos movilizó su flota hacia la zona

-Es un mensaje a Israel de que lo está apoyando. Un mensaje concreto, visible y que está ahí para apoyar. Y segundo, también un mensaje a otros actores regionales de decir, mire, no se metan. Esto es un problema que tiene que ver con Hamas. O sea, también es un mensaje a otros potenciales actores que quieran apoyar o verse involucrados en la contienda. Y Estados Unidos, en este sentido, yo creo que está dando un mensaje de esas características.

-¿Qué otros temas importantes es necesario observar en este conflicto?

-Va a haber mucho paño que cortar respecto de inteligencia, de qué sucedió y cómo Israel llegó a esto. También la ofensiva terrestre que aparentemente va a haber y una de las razones por las cuales la ofensiva aún no se inicia es la situación de Hezbolá en el norte, en la frontera con Líbano.

-¿Hezbolá tiene mayor capacidad militar que Hamas?

-Hezbolá es un grupo terrorista que tiene una fuerza bastante mayor que Hamas. Se estima en el orden de los 60 mil combatientes, que tienen más entrenamiento o más experiencia y que han recibido mayor aporte en términos de equipamiento y armas por parte de Irán. Ya ha habido intercambio entre Hezbolá e Israel. Quizá han destruido algunos objetivos en el sur de Líbano y en Siria que se pretende son de Hezbolá. Pero siempre va a ser una amenaza. El dividir la fuerza de Israel en dos frentes, es un punto necesario para los terroristas, para Hamas y para Hezbolá.

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