El disparo de más de mil cohetes desde Gaza contra ciudades israelíes y la respuesta contundente del Ejército del Estado judío contra ese enclave costero palestino, inició el lunes un nuevo capítulo en la crisis recurrente entre Israel y los grupos de Hamas y Jihad Islámica. Las fuerzas israelíes parecían estar preparándose este jueves para iniciar una ofensiva terrestre en Gaza, lo que redundaría un aumento en la escalada de la violencia.
Un barrio de Jerusalén. El detonante de la actual crisis —en la última semana del mes sagrado musulmán del Ramadán— fue la situación en el barrio Sheij Jarrah, en Jerusalén. Allí un grupo de familias árabes podrían ser desalojadas por la orden inminente de un tribunal, ya que viven en unas viviendas que antes de la guerra árabe-israelí de 1948-1949 era ocupadas por residentes judíos.
Andanada de cohetes. Fue en el marco de esta situación que Hamas, y luego la Jihad Islámica, comenzó a disparar decenas de cohetes contra Jerusalén. Se trata de un cambio llamativo en su objetivo, ya que generalmente la organización islámica ataca los centros urbanos israelíes del sur del país, más cercanos a la franja de Gaza. Por el contrario, en Jerusalén y en los alrededores hay mucha población y barrios de residentes árabes.
Escudo de defensa. De inmediato el Ejército de Israel puso en acción su escudo defensivo antimisiles Cúpula de Hierro. Además, lanzó misiles y atacó con aviones las posiciones de la dirigencia de Hamas y desde donde se han lanzado los cohetes.
Víctimas. Hasta este jueves, las autoridades palestinas de Gaza informaban que había fallecido 83 personas. En Israel, ya habían muerto 7 personas.
Control de la franja. Hamas, el Movimiento de Resistencia Islámica, controla la franja de Gaza desde 2007, cuando dio un virtual golpe de Estado contra el Gobierno de Abbas. Hamas, fundado en 1987 y que es apoyado por Irán, no reconoce los acuerdos de Oslo ni la existencia de Israel. Por medio del contrabando desde Egipto obtiene los cohetes que dispara contra los centros urbanos israelíes.
Escaladas recurrentes. Se trata de la tercera crisis de proporciones, tras la guerra de 2008-2009, y la de 2014.
Escenario político. Israel está con un gobierno interino, a la espera que se forme un nuevo Ejecutivo tras las elecciones del 23 de marzo. El aún primer ministro Benjamín Netanyahu, quien no logró formar Gobierno, parece intentar jugar con los factores a su favor e impedir que el opositor y centrista Yair Lapid sume los apoyos suficientes para sacarlo del cargo en el que está desde 2009.
Gestiones fallidas. Ninguno de los intentos de mediación, de Egipto, Qatar o Naciones Unidas, ha dado frutos.
Londres anunció que llegó a acuerdo con los países del CPTPP para ingresar al bloque. Quedaría vigente el capítulo de resolución de controversias entre inversionistas y Estados con Chile, a lo que se resistía el exsubsecretario Ahumada.
El representante de Chile ante Estados Unidos, Juan Gabriel Valdés, dijo que los socios estratégicos para explotar el litio en el país son economías occidentales tales como EE. UU. y Canadá. China, en cambio, solo pertenece a la categoría de “socio comercial”. Cancillería respaldó al embajador.
El próximo martes 4 de abril, en el Salón de Honor del Congreso, finalmente el Presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, podrá emitir un discurso ante ambas cámaras del Congreso chileno.
La descomposición política y el sombrío panorama económico están detrás del cambio de la retórica del gobierno boliviano respecto de Chile, explicitado en la reciente celebración del Día del Mar. La reiteración discreta de la aspiración histórica de los últimos años ha dado paso al chantaje.
“Aquí no hay nada inusual: Estados Unidos lo hace desde hace décadas. Ellos tienen sus armas nucleares tácticas desplegadas desde hace mucho tiempo en el territorio de sus aliados”, señaló el mandatario ruso, agregando que el 1 de julio concluirá la construcción de un silo para emplazar el armamento nuclear en el vecino país.